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Durante tres días se estudia a los roedores en zonas de casos confirmados

Con especialistas del Sistema de Salud Pública y de Nación se está realizando un trabajo en terreno para estudiar a los roedores que posiblemente sean transmisores de hantavirus. Se colocaron trampas en domicilio y peridomicilio de los pacientes fallecidos por esta enfermedad, confirmados por laboratorio, y se agregaron otras a modo de muestreo en zonas en donde hubo algún caso sospechoso.

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Gracias a un trabajo mancomunado entre profesionales del sector público de Tucumán y de Buenos Aires, se está llevando a cabo en estos días (25, 26 y 27 de abril) un trampeo para roedores con el objetivo de estudiar el hantavirus. Las zonas en donde se está realizando esta actividad son las localidades de El Chañar y El Ojo, del Departamento Burruyacú, por ser lugares en donde se domicilian las dos personas fallecidas por esta enfermedad. También se colocó trampas hogares de La Ramada de Abajo, localidad en la cual residía una mujer que perdió la vida y, si bien no hay confirmación de laboratorio, se sospecha que pudo haber sido hantavirus.

Las trampas se colocan, se las deja toda la noche y a la mañana siguiente se recuperan los roedores, colocándose trampas nuevas para el siguiente día. Esta práctica se realiza durante tres días y los animales son llevados a un laboratorio ambulante apostado en la zona. Allí se los procesa para luego ser estudiados en el Instituto Nacional de Enfermedades Virales en Pergamino, Buenos Aires.

El trabajo en terreno fue ejecutado por personal de la Dirección de Epidemiología del SIPROSA, tres profesionales del Instituto Nacional de Enfermedades Virales (medico biólogo y bioquímico) y tres técnicos especializados. Colaboró personal de los CAPS El Naranjo, El Chañar y La Ramada, además de los familiares de personas con casos confirmados.

Cabe destacar que mientras se tomen las medidas preventivas aconsejadas por el Ministerio de Salud, habrá muy pocas posibilidades de contraer la enfermedad. Algunas recomendaciones:

  • Mantener la vivienda limpia para evitar la presencia de roedores, eliminando los elementos en desuso que puedan servir para la nidación de los mismos.
  • Mantener los alrededores de las viviendas despejados en un perímetro de 30 metros alrededor de la vivienda, limpios y libres de elementos que sirvan de alimento o nidación para los roedores como materiales de desecho, leña, paja, basura doméstica.
  • Mantener corto el pasto, limpiar los alrededores de la vivienda, se debe desratizar el perímetro de la misma.
  • Colocar las huertas y leñas lejos del hogar, en lo posible a 30 metros del mismo.
  • Evitar que los roedores entren o hagan nidos dentro de las casas sellando todas las rendijas de más de 0,5 centímetros de abertura, con materiales como mallas de acero, cemento u otro material resistente a la acción de los roedores.
  • Tener especial cuidado en la puesta en marcha de ventiladores y de aparatos de aire acondicionado cuyos filtros o conductos puedan haber tenido contacto con polvos contaminados, roedores o excretas de los mismos.
  • Construir las edificaciones sobre una base sólida de al menos 30 cm de alto y de una profundidad de 20 cm.
  • Mantener todos los alimentos almacenados en lugares o envases a prueba de roedores.
  • Lavar platos y utensilios de comida inmediatamente después de su uso y depositar los restos de comida en tarros de basura cerrados, tanto al interior como en el exterior de la vivienda.
  • Enterrar la basura diariamente en lugares alejados de la vivienda y cubiertas con a lo menos treinta centímetros de tierra, en el caso de que no se cuente con recolección domiciliaria.
  • Guardar la comida de los animales domésticos, fuera del alcance de los roedores, especialmente en la noche. Proteger las fuentes de abastecimiento de agua.
  • Al ingreso de una habitación cerrada por algún tiempo: Ventile el lugar antes de entrar, porque la concentración de partículas contaminadas es sumamente peligrosa.
  • Moje todas las superficies con agua con lavandina diluida al 10% (1 parte de lavandina en 9 de agua) y deje actuar 30 minutos, deje ventilar y retírese por un tiempo.
  • Para la limpieza use guantes de goma, botas y barbijo o pañuelo.
  • Al terminar realice una higiene cuidadosa de su persona (manos, principalmente) y de los elementos utilizados y cámbiese de ropa.
  • No usar alojamientos cerrados que puedan haber sido infestados por roedores, sin antes ventilarlos.
  • Acampar lejos de malezas y basurales.
  • No dormir directamente sobre el suelo; si es posible, usar un catre de por lo menos 30 cm de altura sobre el suelo y de usar carpas que en lo posible deben tener piso.

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