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El Servicio de Quemados brinda atención especializada y recomendaciones a la población

Los riesgos que la manipulación no adecuada de pirotecnia trae aparejados son múltiples. Incendios, graves quemaduras y lesiones en manos, ojos y oídos son algunos de sus principales peligros. Con la proximidad a las fiestas de fin de año, el cirujano plástico del Servicio de Quemados del Hospital, doctor Federico Barranco, brinda recomendaciones a la comunidad y refiere el trabajo que desde la institución se realiza para brindar respuestas en la emergencia.

En épocas festivas la utilización de pirotecnia tiende a incrementarse a gran escala. Muchas veces, el tiempo que transcurre entre el encendido y la explosión puede no ser el suficiente para que quien la manipula adopte una distancia prudencial.

Respecto a este tema, el doctor Federico Barranco sostuvo:

“La política que tenemos desde el servicio es que no se debe utilizar pirotecnia, ya que las lesiones que vemos en esta época causadas por esta práctica, son importantes y dejan muchas secuelas en la gente. Lo que se observa en la sociedad tucumana es que está acostumbrada al uso de pirotecnia y es difícil restringirla totalmente, por ende es fundamental difundir recomendaciones al respecto”.

El profesional destacó que, en el caso del uso de pirotecnia, esta debe ser legal y adquirida en un local comercial habilitado. Continuó enfatizando que la manipulación debe estar siempre a cargo de adultos responsables. “Los niños no pueden utilizar pirotecnia y debe tenerse en cuenta que todos los elementos pirotécnicos tienen su forma de uso. No se pueden desarmar para experimentar con ellos, por ejemplo: poner petardos debajo de una lata o desarmarlos y encenderles fuego. Eso es riesgoso y puede producir accidentes muy graves”, afirmó.

Al momento de brindar recomendaciones acerca de las primeras medidas que deben tomarse en casa si se sufren quemaduras de piel, el especialista indicó:

“Cuando hay un accidente lo primero que hay que hacer es lavar la zona con agua, mojarla, cubrir con una toalla limpia o una sábana y hacer una consulta urgente en guardia, la que se tenga más cerca del domicilio para que, en caso de requerirse, se realice desde allí la derivación”.

Luego, desde el centro asistencial se procede al control del paciente, del dolor que sufre. Se limpia la herida, y se evalúa el tratamiento a llevar adelante. “Los mecanismos por los que llegan los pacientes a nosotros son directamente consultando en el servicio o desde la guardia derivados para consulta”, aclaró.

En el Hospital Centro de Salud el Servicio de Quemados trabaja con el paciente desde la quemadura hasta la rehabilitación. Siempre la quemadura va a producir una lesión grave que condiciona o que pone en riesgo la vida del paciente, entonces lo primero que se hace es proteger la vida del paciente y después las funciones del mismo, como la movilidad e incluso las secuelas estéticas que puedan venir aparejadas.

“Tenemos armado un circuito de circulación del paciente que ingresa por guardia, va a terapia intensiva y finalmente pasa por la etapa de rehabilitación en la sala de quemados.
Actualmente el promedio mensual de pacientes severos es de 2 o 3 y cada uno de ellos tiene un promedio de internación de 1 mes y medio a 2 meses, dependiendo de la gravedad”, contó Barranco. En tanto, por consultorio externo se atienden cerca de 60 a 80 consultas semanales.

“Es para destacar que hay una voluntad de todo el hospital de crecer con el servicio. Se están haciendo intervenciones en instrumental, en equipamiento y se están incorporando nuevos cirujanos, todos con muy buena formación para mejorar la atención de los pacientes quemados de Tucumán y de otras provincias también, lo cual es motivo de orgullo para nuestro trabajo. Somos centro de referencia para quemados adultos”, finalizó.

Algunas recomendaciones generales

  • No debés guardarte pirotecnia en los bolsillos.
  • Evitá experimentar o detonar dentro de frascos, botellas, latas u otros recipientes.
  • No toqués o te acerques a productos que no hayan explotado o que aparentemente se hayan apagado. Ante la duda, arrojá agua sobre la pirotecnia.
  • Apoyá la pirotecnia en el suelo para encenderla y no la sostengas en la mano.
  • Evitá usar pirotecnia en lugares cerrados y alejate de garrafas, estaciones de servicio, autos y cocinas.
  • No apuntes la pirotecnia a personas, animales, ventanas o lugares peligrosos.
  • No debés manipularla cerca de niños.
  • Leé las instrucciones de uso.
  • La pirotecnia clandestina potencia los riesgos de sufrir un accidente, ya que suele ser de fabricación precaria y peligrosa. Por eso verificá que el producto cuente con la certificación del RENAR, número de inscripción del fabricante y código de registro.
  • En caso de sufrir una quemadura, no uses cremas ni “remedios caseros”.

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