Referentes de la medicina tucumana fueron reconocidos por el Ministerio de Salud de la provincia
La ministra de Salud Pública, doctora Rossana Chahla, junto al equipo de gabinete de la cartera sanitaria, realizó en el Salón Blanco de Casa de Gobierno, un reconocimiento a través de la entrega de certificados a profesionales de gran trayectoria en la medicina de la provincia, en el marco de las celebraciones que se realizaron por el día del médico.
En la ocasión, el doctor Armando Mario Pérez de Nucci, emprendió un recorrido por los hechos más significativos que componen la historia de la medicina en Tucumán y los doctores Emilio Buabse y Francisco Palazzo dirigieron sus palabras a la comunidad de especialistas.
El doctor Hugo Japaze, anatomopatólogo de formación internacional y local, fue uno de los distinguidos homenajeados de la jornada y expresó: “Siempre que se homenajea a la gente que en el silencio y en la oscuridad, en las noches de trasnoche cumplen con la tarea cuyo único objetivo es asistir al que sufre; constituye un acto de agradecimiento. El reconocimiento es siempre alentador de nuevas y mayores épicas, esto ha significado este homenaje para mí”.
Para continuar Japaze calificó como ‘gran maestro de la medicina’ al paciente, que en sus palabras, “reviste no solo el misterio que constituye la enfermedad, sino la riqueza de su manifestación como hombre consciente de su tránsito y como significante en cuanto al contenido del valor de la vida”.
Por su parte, el doctor Armando Mario Pérez de Nucci, quien fuera médico rural durante 25 años, resaltó: “Este homenaje me ha parecido una excelente idea por parte de nuestra ministra a los médicos de trinchera, médicos de hospital, de los pobres, que es el destino final de nuestra medicina. Aquí hay gente que ha sido maestra y discípula mía, siento una enorme cuota de felicidad”.
“Los médicos debemos volver siempre a la fuente y reconocer que vemos a hombres enfermos, que por eso existimos. Y para los jóvenes que piensan emprender esta carrera recomiendo que desde el primer momento graben en sus cabezas esta frase que define nuestra vocación: Si no sirvo ¿Para qué sirvo?”, reflexionó el admirable profesional.
Finalmente, el doctor Francisco Palazzo enfatizó el agrado y la alegría que le generó la jornada. “Estas son cosas que engrandecen el espíritu, estamos rodeados de muchas malas noticias y desagradecimiento y esta es una oportunidad para poner en escena un acto de gran cordialidad y generosidad, que fortalece nuestro espíritu y es la primera vez que tenemos un homenaje así por parte de nuestras autoridades para gente que ha dejado una impronta en la medicina de Tucumán”.
“Los hospitales son modernos, se han puesto esfuerzos en equipamiento y en lo que respecta a los trabajadores de la salud siempre debemos tener un grado de insatisfacción positiva para ir por más. Se están poniendo todos los esfuerzos en mejorar la salud pública pero todos los trabajadores de Salud junto debemos tirar del carro, si tira un solo costado no avanza”, concluyó Palazzo.
