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Referentes españoles en Humanización de la Salud visitaron y conocieron la labor del hospital Padilla

En el marco de las I Jornadas Internacionales en la temática que se realizarán los días 25 y 26 de abril en la provincia y con eje en los cuidados del profesional que atiende a pacientes críticos, la directora de la institución, doctora Olga Fernández, recibió a los doctores Macarena Gálvez y Vicente Arráez que compartirán con profesionales locales la experiencia desarrollada en España.

Las I Jornadas Internacionales de Humanización de la Salud ‘Cuidando al Profesional del Paciente Crítico’ se llevarán adelante el jueves y viernes próximo y fueron organizadas por la Cátedra de Enfermería en Alto Riesgo de la Facultad de Medicina de la UNT en colaboración con el Comité de Humanización del Hospital Ángel C. Padilla y la Escuela de Enfermería de ATSA.

Para el encuentro se contará con la participación de la psicóloga del Proyecto de Humanización de los Cuidados Intensivos en España, doctora en Psicología Macarena Gálvez; y del médico de Cuidados Intensivos del Hospital Universitario Elche y responsable del Área de Acompañamiento del Proceso de Morir del Proyecto HUCI, doctor Vicente Arráez. Ambos especialistas visitaron este miércoles el efector para interiorizarse sobre la labor que en la materia se desarrolla.

“A los profesionales sanitarios nos han enseñado tradicionalmente a mirar hacia afuera, a buscar síntomas y signos, a atender a la enfermedad, pero no nos enseñaron que todo eso no se puede hacer si uno no se mira adentro primero y no se cuida”, afirmó Gálvez, al tiempo que introdujo los aspectos principales de su disertación referida al desgaste del personal de cuidados críticos y las herramientas que pueden implementarse para evitar o reducir esta problemática.

El cuidado del cuidador dentro de cualquier proyecto de humanización es clave, porque el agente humanizador va a ser ese personal sanitario que, si no cuida su estabilidad emocional y sus expectativas laborales, no logrará darle sentido al trabajo que realiza.

“Abordaremos, el síndrome de burnout y el sentido de la labor del personal sanitario. Dependiendo de la intervención y del nivel de prevención se tienen en cuenta diferentes herramientas, desde garantizar las condiciones de trabajo e insumos de ese recurso humano para que pueda desempeñarse de forma sana y equilibrada; pasando por los recaudos que la propia persona debe tener para su equilibrio, armonía y el especial contacto con el paciente”, continuó la profesional.

Siguiendo esta línea, Gálvez sostuvo que, en la instancia de intervención cuando la persona está muy dañada, lo que se debe hacer es facilitar la ayuda emocional y profesional si la necesitara, e intentar una adecuada reincorporación al trabajo si requirió previamente de una baja laboral.

“Contactar con la persona de una forma especial, cuidarse a sí mismo, establecer unas maneras de comunicarse con el paciente y su familia, son los factores que van a ayudar en el resto del trabajo. Estos aspectos están en manos de cada uno de nosotros”, pronunció como mensaje la experta.

Acompañar en el Proceso de Morir

El especialista en el área, doctor Vicente Arráez, hizo hincapié en que el proceso de morir implica abordar aspectos que muchas veces se ignoran porque ponen en evidencia nuestra vulnerabilidad. Hablar de este proceso y como acompañarlo tiene que ver con un recorrido hacia la consciencia de nuestra mortalidad.

“Los profesionales tenemos que entender que cuando estamos cerca del proceso de morir debemos estar como personas y no para enfocarnos en la enfermedad. En esa etapa cobra mayor sentido la dimensión de la persona con valores esenciales, tanto para quien está muriendo como para quien lo está acompañando”, contó Arráez.

En este sentido el profesional recomienda contactar con el sufrimiento del otro que nos recuerda también al nuestro: “Cuanto más conocimiento, más raciocinio y ego está en juego en nuestra posición ante el mundo, más difícil será acompañar el proceso, un mensaje que empleamos siempre es que la muerte es inevitable y es preciso entender que el problema de quien muere deja de existir cuando se acerca la muerte y acompaña más a las familias; por eso conectar desde el amor es clave”.

Finalmente, el jefe del Departamento de Enfermería, licenciado Marcelo Morales, recordó la importancia de seguir fomentando estos espacios formativos de actualización, ya que la formación de grado convencional no prepara a los profesionales para comunicar malas noticias, ni afrontar el sufrimiento de otra persona, su muerte y el dolor de la familia, lo cual desencadena un aumento de enfermedades profesionales y desgaste en el ámbito laboral.

Profesionales de todo el equipo de salud como médicos, enfermeros, psicólogos y kinesiólogos, participarán de las jornadas que inician mañana y concluyen el viernes en el Hotel Carlos V.

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