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El Ministerio de Salud entregó una silla postural a un niño con distrofia muscular en el Hospital Avellaneda

En representación del Gobernador Osvaldo Jaldo, el Ministerio de Salud Pública, a cargo del doctor Luis Medina Ruiz, continúa fortaleciendo su compromiso con la inclusión y la equidad sanitaria. En esta oportunidad, se realizó la entrega de una silla postural a Lautaro Reynoso, un niño de 9 años que padece síndrome de Duchenne, una enfermedad degenerativa que afecta la movilidad y la fuerza muscular.

El acto tuvo lugar en el Hospital Avellaneda, donde Lautaro realiza sus terapias de rehabilitación. Acompañaron el momento la mamá del niño, profesionales del equipo interdisciplinario y autoridades del efector, quienes destacaron la importancia de este tipo de dispositivos que mejoran la calidad de vida de los pacientes y su entorno familiar.

El gobernador Osvaldo Jaldo y el ministro Medina Ruiz impulsan de manera constante políticas públicas orientadas a garantizar la atención integral de niños, niñas y adolescentes con enfermedades crónicas, promoviendo el acceso a la rehabilitación, la movilidad asistida y la contención familiar en el sistema público de salud.

Un avance hacia la autonomía

La doctora Patricia Inés Medina, subdirectora médica del Hospital Avellaneda, resaltó el impacto positivo de esta entrega en la vida del pequeño paciente: “Gracias a las gestiones de nuestro ministro de Salud, que siempre está atento, y al acompañamiento del gobernador, hoy pudimos entregar una silla postural de alto costo a un niño que hace algunos meses dejó de caminar. Esta herramienta le permitirá desplazarse solo, ganar independencia y aliviar también el esfuerzo cotidiano de su familia”.

Lautaro realiza tres veces por semana terapias de fisiatría, terapia ocupacional, psicología y fonoaudiología, con el objetivo de conservar sus funciones motrices y cognitivas. “Sabemos que su enfermedad es progresiva, pero trabajamos para que evolucione de la mejor manera posible y tenga una buena calidad de vida”, agregó la profesional.

El doctor Matías Merkusa, médico fisiatra y jefe del Servicio de Rehabilitación, explicó: “Lautaro tiene una distrofia muscular de Duchenne, una patología que provoca la pérdida progresiva de fuerza. Dejó de caminar hace tres meses, y con esta silla buscamos que logre independencia funcional. Es un niño muy participativo, que viene trabajando con nosotros hace tres años”.

El especialista destacó el trabajo coordinado entre los distintos profesionales: kinesiólogos, terapeutas ocupacionales, psicólogos y fonoaudiólogos, quienes acompañan no solo al paciente, sino también a su familia. “En este servicio atendemos a niños y adultos con distintas discapacidades motoras. Se evalúan sus necesidades y se gestionan dispositivos según cada caso. Las entregas de sillas son frecuentes, porque la rehabilitación implica también brindar herramientas que permitan autonomía y dignidad”, sostuvo.

Camila Suárez, mamá de Lautaro, expresó su emoción y agradecimiento: “Esta silla significa muchísimo para nosotros. Le va a permitir moverse solo, sobre todo en la escuela. Antes lo llevaba alzado o en el coche junto con mi otro hijo. Ahora va a poder manejarse con más libertad. Estoy muy agradecida con todos los profesionales y con el Ministerio de Salud que nos acompañó desde el primer momento”.

Camila también contó que su hijo disfruta asistir al hospital: “Le encanta venir a sus terapias, jugar, distraerse. Dice que venir lo ayuda, que lo hace sentir bien. Es un lugar donde lo cuidan y él se siente feliz”.

La kinesióloga Eugenia Ferreyra, quien acompaña a Lautaro en sus terapias, describió el proceso con orgullo y afecto: “Trabajar con él es un desafío y una alegría. Es un niño con mucha energía y ganas de superarse. Mi tarea es acompañarlo para que sea funcional, que pueda vestirse, trasladarse, ir al baño solo. Con esta silla buscamos que logre independencia. Me emociona verlo feliz, porque cada avance suyo es un logro compartido”.

Un Estado presente que cuida

La entrega de esta silla postural refleja el compromiso del Gobierno de Tucumán, encabezado por el gobernador Osvaldo Jaldo, y del Ministerio de Salud Pública, dirigido por el doctor Luis Medina Ruiz, con una política sanitaria inclusiva que prioriza la equidad, la rehabilitación y la accesibilidad.

Desde el sistema público, se trabaja cada día para acompañar a las familias, garantizar el acceso a terapias, dispositivos y contención integral, y asegurar que cada niño tucumano tenga las mismas oportunidades de desarrollo, autonomía y bienestar.

El Hospital Avellaneda continúa consolidándose como referente en rehabilitación y atención integral, reafirmando que la salud pública tucumana está presente donde más se la necesita.

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