Cuidemos el agua de la pileta para preservar la salud

El agua es esencial e insustituible para el desarrollo humano. Además es un recurso agotable y cada vez más escaso a nivel mundial. Por eso entre todos debemos preservarla. Cómo  cuidar el agua de las piletas para evitar enfermedades.

En verano es fundamental cuidar el agua de las piletas no solo por una conciencia ecológica, sino para preservar nuestra salud.             Según la doctora Graciela Ojeda, Jefe Departamento Saneamiento Básico-DGSA, las piscinas son la fuente de contagio de varias enfermedades,  la ingesta accidental de agua es la primera vía de transmisión de microbios patógenos, los que  pueden provocar enfermedades como fiebre tifoidea, cólera, hepatitis A, llegando incluso a causar la muerte. También se incluyen infecciones de piel, ojos, oídos, infecciones respiratorias  y desordenes gastrointestinales como las diarreas, siendo estas últimas las enfermedades de mayor prevalencia.

Además se debe tener en cuenta que se necesita una gran cantidad de este vital elemento para llenar las piscinas de material (tienen entre 50 mil y 70 mil litros) y las piletas de lona (contienen entre 5 mil y 10 mil litros) lo que hace más importante mantenerlas en óptimas condiciones para no derrochar agua.

Para mantener el agua de los natatorios es necesario utilizar una serie de productos para evitar, por ejemplo,  la presencia de bacterias y algas.

Existe una variedad de productos según las necesidades:

• Desinfectantes de agua: el cloro mantiene el agua libre de bacterias, ya que su función es destruir estos microorganismos. Por eso, es importante realizar el tratamiento con la cantidad de cloro adecuada, teniendo en cuenta el volumen de agua que contenga la pileta.

• Reguladores de pH: es importante controlar el pH del agua al menos una vez por semana, utilizando el kit de medición, pues ello influye directamente en la efectividad del cloro.

• Alguicidas: para eliminar las algas presentes en la piscina, las cuales provocan que el agua se torne verdosa y que las paredes y el fondo de la pileta se vuelvan resbaladizos.

• Floculantes – coagulantes – clarificadores: Estas sustancias son utilizadas en el mantenimiento de piscinas en las que el agua se ha vuelto turbia debido a la presencia de partículas en suspensión. Los floculantes aumentan el tamaño de dichas partículas y provocan su decantación al fondo de la pileta, facilitando su limpieza mediante la utilización del barrefondos.

Todos estos productos son regulados por la ANMAT. A fin de asegurar la efectividad de estos productos, es muy importante respetar estrictamente las indicaciones del rótulo, en lo que se refiere a dosificación, precauciones y condiciones de almacenamiento. Además, deben aplicarse en ausencia de bañistas, luego de su aplicación el agua debe ser recirculada y siempre deben mantenerse fuera del alcance de los niños y de las mascotas.

Recomendaciones generales al público:

• Usar solamente natatorios habilitados, ya que ello implica que los mismos son controlados por las autoridades de Salud Pública.

• Reconocer los peligros: Tener cuidado, las piletas de natación son peligrosas. El agua presenta un riesgo de ahogamiento y pueden ocurrir daños y lesiones debidos a golpes contra las adyacencias duras de las piscinas.

• Respetar  siempre lo que le indican los guardavidas y recordar  que un momento de comportamiento inadecuado podría costar una vida.

• No nadar nunca bajo la influencia del alcohol. Ser particularmente cuidadosos si se encuentran “médicamente condicionados”, esto es, asma, diabetes o problemas cardíacos.

• Evitar el ingreso a la piscina si padece de un trastorno gastrointestinal (estomacal) o una infección respiratoria o de piel, porque ello facilitaría la  transmisión de  gérmenes (evitar el contagio).

• Ducharse antes de ingresar: esto reducirá la cantidad de gérmenes, sudor y sustancias químicas (tales como cremas, cosméticos, protectores) que el usuario trasfiere al agua.

• Usar obligatoriamente gorro de baño.

• Evitar el uso de chicles u otros masticables: esto reduce el riesgo de ingesta de agua durante las actividades acuáticas.

• No utilice lentes de contacto en las actividades acuáticas.

Para la doctora Ojeda es importante también crear conciencia en  los dueños y/o encargados de los natatorios y sugiere realizar los trámites de Habilitación en el Departamento Saneamiento Básico  (Av Ejercito del Norte 343 – Capital, de 7 a 13 hs). Recuerde, para su seguridad, concurra a las piletas que están habilitadas y siguen todas las normas de seguridad e higiene.