12 de mayo: Día del Fonoaudiólogo
Se celebra en el país en conmemoración al aniversario de la creación de la primera Entidad Científica Fonoaudiológica Argentina (ASALFA), en 1948. Tucumán cuenta actualmente con más de 100 profesionales en el Sistema Provincial de Salud, asistiendo a la población en los tres niveles de atención.
“Trabajamos en conjunto con el departamento de Rehabilitación del PRIS. Estamos intentando agrupar a todos los fonoaudiólogos que en este momento somos 130 en el Siprosa, realizando diferentes tipos de actividades, pero fundamentalmente en la promoción y prevención de la salud fonoaudiológica. Atendemos a niños, adolescentes, adultos, y adultos mayores”, cuenta la referente de Fonoaudiología del Siprosa, licenciada Karina Elisa Burgos.
Los especialistas se desempeñan tanto en los CAPS, CIC, CAC, como en las policlínicas, y en el tercer nivel de atención a través de los hospitales de referencia.
“Las patologías prevalentes en niños son los trastornos específicos del lenguaje, los trastornos del espectro autista, y del lenguaje lecto-escrito; éstos son los que tenemos mayor demanda. En este sentido, hay patologías o trastornos específicos que se pueden trabajar en los CAPS, mientras que los de mayor complejidad se derivan a un segundo nivel, y los que requieren aparatología y tecnología de otra índole al tercer nivel de atención”, explica.
Así mismo, comenta que por lo general responden a la demanda espontánea de los padres, que en realidad son los primeros que pesquisan estas alteraciones en los niños. Hay pruebas específicas que se pueden realizar para ver si el paciente se está comunicando con su entorno, y sobre todo para trabajar sobre la dinámica familiar y orientar a la familia a cómo puede estimular el lenguaje en los chicos.
“Conjuntamente trabajamos con los pediatras en lo que es la evaluación del desarrollo infantil. No hay una edad específica para consultar; el niño es evaluado desde que sale de la Maternidad con las otoemisiones acústicas y se le hace un seguimiento continuo. Todas las veces que va al pediatra, la fonoaudióloga puede participar y va pesquisando algún tipo de trastorno”, detalla Burgos.
Por último, expresa que el trabajo que realizan a diario se completa con la promoción de salud que desarrollan en las escuelas cercanas a los efectores, dando charlas a las maestras y espacios para despejar dudas sobre los trastornos.
“Cada vez somos más las fonoaudiólogas incorporadas al Sistema Provincial de Salud, no esperamos que el paciente llegue con su problemática o trastorno, sino que nosotros nos acercamos a la comunidad”, cierra.