Qué es la Dismorfia Corporal
La referente del Programa Provincial de Prevención de Trastornos Alimentarios de la Dirección General de Salud Mental y psicóloga del CEPTA, licenciada Mabel Alonso, expresó que este cuadro general tiene su base en una distorsión de la imagen corporal que tienen las personas y que llevan paulatinamente a tener desórdenes en la alimentación.
Según la profesional, el diagnóstico tiene su base en el área de salud mental: “Se trata de una patología que está asociada a la imagen corporal. La persona que la padece generalmente tiene comportamientos anoréxicos o bulímicos porque la percepción de su cuerpo está desprendida de la realidad, entonces las acciones compensatorias que hace esa persona se asocian a los desórdenes en la alimentación”.
Alonso manifestó que actualmente los cánones de belleza o las normativas en relación a lo que es bello o no están promocionadas por los medios de comunicación y por toda la nueva cultura de la imagen que hacen que se uniformice cierta forma corporal. “Los modelos paradigmáticos de la moda dejan, a veces, muchas imágenes estáticas que se plantean como ideales y es por eso que las personas quieren llegar a eso. Esto impacta mucho en las edades tempranas de adolescencia o preadolescencia, porque es ahí donde los jóvenes miran ese ideal y tratan de llegar a cumplir con lo mismo”, explicó.
En este sentido, sostuvo que generalmente estos ideales de belleza son: armonía facial, determinada forma del cuerpo, incluso señala que hay partes que generan mayor ansiedad que otras. Resalta que en las mujeres los estándares de belleza se centran en el abdomen y en la forma de los pechos; y en los hombres suele ser el torso, las piernas y la cola.
Durante la pandemia, la profesional destacó que las personas quedaron a la merced del uso de dispositivos móviles y que el estar consumiendo eso todo el día generó mucha ansiedad. “No olvidemos que como no hay una regulación ordenada de esto, los adolescentes están expuestos todo el tiempo a esos ideales de la perfección o improntas de la moda. Esta es una sintomatología que aparece casi siempre asociada a los trastornos alimentarios, por lo que la consulta es muy frecuente y a menor edad, más frecuente todavía”, agregó.
Los signos más notorios de esta patología son: desórdenes o dificultades en relación a la alimentación, exigencias por el cambio fisonómico del cuerpo, dificultades o inhibiciones respecto de mostrarse en público, el uso de los filtros en internet para disimular o mejorar una forma física específica, el tipo de vestimenta, entre otros.
“Todos estos son signos de alerta. Es por eso que es importante la prevención y la promoción, porque son acciones que ayudan”, finalizó Alonso.