“2021 fue un año de recuperación para el área de procuración y trasplante luego del gran impacto de la pandemia en 2020”

Así lo definió el director de CUCAITUC, doctor Aldo Bunader, que comentó cómo se encuentra trabajando la institución actualmente en materia de trasplantes.

En este sentido el referente sostuvo que dentro de CUCAITUC se cuenta con dos áreas de suma importancia que apuntan a la difusión y abordaje de pacientes que serán donantes de órgano -es decir el área de procuración- y la que se encarga del trasplante de órganos y tejidos en sí.

“Tenemos una amplia gama de trabajo no solo en la parte pública, sino también en la privada donde fiscalizamos los lugares donde se hacen las ablaciones y trasplantes, los equipos, los curriculum y experiencia de cada médico que interviene y realiza estas prácticas”, detalló Bunader al tiempo que destacó el principal centro de la labor en la provincia es el hospital Padilla, que hace casi 6 años es el mayor efector público referente en la temática de procuración y trasplantes de órganos y tejidos.

Siguiendo esta línea el directivo resaltó la existencia del Banco de Huesos en el Padilla, de un área específicamente dirigida y especializada en la procuración de órganos y tejidos y de áreas de implantes de riñón y de córnea. Al tiempo afirmó que en el sector privado se cuenta también con servicios especializados en implantes y procuración, si bien en menor medida.

“2021 fue un año de recuperación de la gran pandemia que atravesamos en 2020 y que impactó mucho en la procuración y trasplante de órganos, ya que todo nuestro quehacer se desarrolla en las unidades de terapia intensiva, que estaban prácticamente cerradas para los pacientes no Covid. Es por esto y por la imposibilidad de comunicaciones terrestres y de concentrar la logística que se emplea para trasladar órganos y equipos, que en 2020 nuestra actividad disminuyó bastante”, reflexionó Bunader, si bien aclaró que pese al cuadro sanitario y la reorganización del recurso humano en pos de la atención en pandemia, la actividad nunca cesó por completo en la provincia.

De 10 donantes por millón de habitantes que se registraron durante 2020, en 2021 la cifra ascendió y casi se duplicó llegando a 19.7, lo cual en palabras del profesional habla de una franca recuperación de la actividad que impulsa a continuar las labores de concientización y promoción para acercarse a los números de 2019, cuando se registraron 34 donantes por millón de habitantes.

“Nos resta seguir creciendo, mejorar los circuitos hospitalarios y la logística al 100 por ciento para recuperarnos y regresar a los niveles que tuvimos. Hace tiempo que en nuestro país rige la conocida como Ley Justina que establece que todos los argentinos mayores de 18 años que no expresen su voluntad en contra la donación, son donantes de órganos como en muchos países del mundo; antes de 2017 no contábamos con esta legislación que logró aumentar los números de donantes”, dijo y aclaró que la ley en Tucumán no tuvo un diferenciado impacto, porque afortunadamente la comunidad ya era muy solidaria de por sí previamente, ya que conocen mucho del tema y están empapados de información respecto a la actividad que salva vidas.

Respecto al tema Bunader manifestó que para los equipos que trabajan en esto sigue siendo fundamental ampliar la información en esta área para que los pacientes tengan acceso a las listas de espera y que quienes se encuentren en situaciones de riesgo vital puedan acercarse a los centro médicos y que tengan cada vez más chances de salvarse y mejorar su calidad de vida.

“Necesitamos que los pacientes consulten, hagan sus estudios diagnósticos para ingresar a las listas de espera, son cosas que a veces cuando uno está enfermo son complicadas pero muy necesarias en pos de mejorarse. Invitamos a todos los interesados a ingresar a la página web de INCUCAI donde la información de procuración y trasplante es abierta a la comunidad y ante cualquier consulta las oficinas de CUCAITUC se encuentran en Piedras 1111”, finalizó.