Cómo conservar la leche materna
La médica de Neonatología del Instituto Maternidad, doctora Claudia Quinteros, ofrece pautas útiles al momento de almacenar la leche para el lactante de manera segura.
La lactancia materna es el mejor principio para una vida saludable. La leche de madre no sólo contiene todos los nutrientes que el niño necesita, sino que es en sí misma un tejido vivo, incomparable con cualquier fórmula de leche artificial, además de que es la única que contiene anticuerpos que protegen a los niños de muchas enfermedades. Sin embargo, por cuestiones laborales o de estudio, muchas madres deben separarse momentáneamente de su bebé y extraer la leche de sus pechos para guardarla y usarla oportunamente cuando sea necesario, para los que hay que tener algunas recordaciones.
Si la mamá decidió extraerse la leche, existen dos métodos a disposición: la extracción manual y la que se hace mediante un extractor o succionador materno. “La primera opción es muy buena, pero infiere un gran gasto de energía porque debe realizarlo con sus propias manos. Si bien es la manera en la que menos se daña el pezón, es más trabajosa. También existen los extractores de leche, de los cuales hay muchos modelos, tanto manuales como eléctricos. Entre los manuales actualmente se están dejando de lado los más simples que producían daño en el pezón y no extraían mucho volumen de líquido. Otro modelo de extractor manual son los ‘a gatillo’, que serían los mejores dentro de esta línea. Por último, existen los extractores eléctricos, que hoy se consiguen a bajo precio y serían los ideales, ya que inclusive hay algunos que brindan la posibilidad de extraer leche de los dos pechos de forma simultánea, lo que proporciona mayor cantidad de volumen de leche”, expresó Quinteros.
Cómo conservar la leche
- Higiene: es muy importante en la extracción de leche, por eso recuerda siempre lavar tus manos antes de empezar. También es necesario lavar y esterilizar el extractor, así como los recipientes que uses para almacenarla.
- Recipientes: antes se conservaba en frascos de urocultivo o frascos estériles, pero en realidad estos frascos no están aptos para conservar alimentos, por lo que lo ideal para conservar la leche humana son frascos de vidrio con tapa de plástico o frascos de polipropileno, pero que sean aptos. Y para que se puedan usar, deben estar aprobados y tener el símbolo del triángulo con el número 5 en su interior, que aparece generalmente en la parte inferior del envase y que son los que están aptos para conservar la leche humana. También están las bolsitas, pero después no se pueden reutilizar y hay que descartarlas, al contrario de los frascos que se lavan y se esterilizan con agua hirviendo para después poder volver a usar.
- Refrigeración: cuando la mamá se extrae la leche debe rotularla con la fecha de extracción, porque tiene una fecha de vencimiento en el freezer. La leche humana puede conservarse a temperatura ambiente entre 3 y 6 horas, aunque lo más recordable es que no sea más de 3 por las altas temperaturas que se registran en la provincia. En la heladera puede estar hasta 4 días, pero en la parte posterior de refrigerador, lejos de la puerta, donde hay muchos cambios de temperatura. Y en el freezer dura hasta 6 meses.
- ¿Cómo descongelo? Lo mejor es sacar la leche materna del congelador una noche antes y guardarla en el refrigerador. De esta manera estará lista para el día siguiente. Si tiene que descongelarla rápidamente, se puede usar un calentador de biberones. Si no tiene uno, el baño maría es la mejor opción. También es recordable utilizar la leche descongelada dentro de las 24 horas posteriores, y si el bebé no termina la toma, desechar los residuos.