Manzur: “Siempre estoy mirando hacia adelante”
Así lo afirmó el vicegobernador de Tucumán, Juan Manzur, en una entrevista realizada por el Ministro de Salud Pública, Pablo Yedlin, en el programa radial ‘Ondas de Salud’. Habló de la importancia que tuvo su familia en su vida profesional, de su gestión en el Ministerio de la Nación y de su relación con la presidenta de la Nación.
Manzur tiene tres hijos: Samira, Waded y Elías, fruto de su relación con Sandra, su esposa. “Yo pude desarrollar todo mi trabajo porque mi señora y los chicos siempre me acompañaron. Cuando tuve que mudarme a San Luis nos fuimos todos, toda la familia; también en Buenos Aires”, contó.
En 2003, cuando volvió a Tucumán, creyó que era definitivo. También estuvo toda su familia. “Siempre que viajo y tengo la posibilidad, me acompañan. Desde principio de este año están aquí, en Tucumán, por los tiempos electorales. Ya quería volver a mi provincia”, enfatizó.
Los orígenes
En la entrevista radial, el vicegobernador también habló de su religión. “Mi señora y yo somos descendientes de libaneses y somos cristianos maronitas, parte de la rama y ritos orientales de la iglesia. Tenemos nuestro sacerdote y obispo, nuestro patriarca que está en el Líbano y a su vez tiene rango de cardenal de la iglesia y participa de la elección del sumo pontífice”, se explayó.
Al respecto, dijo que esos son sus orígenes, su descendencia y en ese sentido destacó que el año pasado vino la autoridad máxima de los maronitas a la Argentina y a Tucumán. “Esto habla a las claras de un nexo vigente”, manifestó. Al igual que muchos descendientes de diferentes orígenes, los padres y abuelos de Manzur vinieron al país y a la provincia buscando una mejor vida. “Ellos vinieron por trabajo, progreso, estudio para sus hijos, que se formen y sean hombres y mujeres de bien. Ese era el objetivo central. Esto es lo que rescato, valoro y lo que nos hace amar más a nuestro país”, afirmó.
Sobre la gestión y el trabajo, dijo que las personas siempre tienen que actuar haciendo las cosas como corresponde, poder acostarse tranquilo, dormir sereno y con la conciencia en paz.
“Uno como cualquier ser humano se puede equivocar y cometer errores, lo importante es trabajar y hacer la tarea que a uno le asignan de la mejor manera posible. Es cierto que en nuestro ámbito muchas veces se dicen cosas que no corresponden, pero eso forma parte también de la pirotecnia verbal propia del ámbito de la política”. (Juan Manzur)
En este sentido, dijo que la clave para gestionar en crisis es mantener la serenidad, la prudencia y la humildad de pedir ayuda. “Es importante poder identificar a la gente que puede ayudar y a partir de ahí empezar a clarificar los problemas y con los expertos en cada una de las materias y capítulos plantear la mejor respuesta y solución”, continuó. Además, consideró que no hay cuestiones mágicas. “No creo en los hechos espasmódicos; creo en el trabajo en equipo, en lo que uno sabe y estudió, en conformar conjuntos, aprovechar la experiencia de la gente y tomar decisiones cuando uno logra los consensos para avanzar, que es lo que siempre traté de hacer”, aseguró.
Un agradecido
Al respecto, expresó: “Soy un agradecido de toda la gente que me ayudó, incluso de forma anónima. Los méritos son de mucha gente que participa activamente en diferentes situaciones”, manifestó.
Finalmente, dijo que el hecho de ser uno de los pocos ministros tucumanos fue una enorme responsabilidad. “Me tocó asumir en la peor crisis sanitaria de los últimos 100 años. Y el hecho de que no se haya necesitado buscar expertos en el exterior y sí a un hombre formado en el interior, en la Universidad de Medicina de Tucumán, es muy importante. De mis prácticas en el Hospital Padilla aprendí tanto de tantos colegas, para resolver y tomar iniciativas que tienen impacto en toda la población”, aseveró.
En relación con la presidenta
Respecto a la relación con la presidenta, el vicegobernador provincial manifestó:
“Es una mujer brillante y muy culta. Normalmente pide informes de cada tema y los lee a todos, monitoreando permanentemente cada área: epidemiología, situación sanitaria, escenarios posibles en cuanto a vulnerabilidades. Sorprende la capacidad que tiene”, consideró.
Además, contó que él mantenía reuniones semanales con la primer mandataria en las que se planteaba una serie de temas y acciones para el fortalecimiento de la estructura sanitaria, de creación de hospitales, de centros de salud, de todo lo vinculado a vacunas y su impacto, costo-efectividad.
“Con eso no solo generé una relación de trabajo, sino también de afecto y confianza. Nunca esperé su deferencia en sus palabras tan valiosas, no lo podía creer, fue muy emotivo”, comentó.
Finalmente agradeció emocionado y entre lágrimas a todos los que lo formaron y fueron parte esencial en su camino.