Día Nacional del Donante de Médula Ósea
Este día se estableció con el fin de difundir la importancia de la donación voluntaria de CPH (Células Progenitoras Hematopoyéticas), con las que actualmente se tratan diversas enfermedades hematológicas. Los familiares son los mejores donantes, pero si no se cuenta con ellos (lo que ocurre en más del 70% de los casos) se recurre a una red de registros internacionales que agrupa a más de 10 millones de donantes voluntarios.
“Estamos organizando las actividades para recordar este día en la primera quincena del mes de abril. Deseamos reunirnos en la plaza principal y estimular la donación de médula por parte de la población”, dijo el director del CUCAITUC, Aldo Bunader.
En este sentido, remarcó que será importante dar a conocer los últimos avances en el campo de las donaciones e implante de médula, algo que beneficia a muchas personas, especialmente a los niños. “Es fundamental esta donación porque es altruista, voluntaria, anónima, no lleva ningún otro sentido que no sea la donación.
Esto se registra en bancos nacionales e internacionales, y cuando un paciente tiene algún problema hematooncológico, se cita a estos bancos para ver la compatibilidad de la sangre o médula”, explicó.
Por su parte, la licenciada María Del Carmen Nazr, del Área de Capacitación y Extensión del CUCAITUC, informó que se están haciendo reuniones organizativas por el día del donante de Hemato para trasplante y destacó que hay instituciones que están trabajando en el tema: Educación Sanitaria del Programa Integrado de salud, Servicio de Aféresis del Hospital Padilla, Banco de Sangre, Servicio de Hemato del Hospital Eva Perón y voluntariados. “Las actividades serán en la primera quincena de abril, donde también participará la comunidad educativa.
Es muy importante porque la idea desde el CUCAI es la integración de la salud con toda la comunidad”, afirmó Nazr. Además, contó que se espera la participación de la población a todos los eventos para entender la importancia de la donación a pacientes con estas necesidades.
Historia de Vida
José tiene 29 años y fue intervenido en septiembre del 2013. “En el 2010 comencé con complicaciones de salud, con tumores en el cuello. Me trataron en el Centro de Salud y en Hospital Padilla. Me atendieron hasta que pude realizar el trasplante en Buenos Aires”, comenzó contando. Después del trasplante de médula ósea donada por su hermano gemelo, José mejoró. Antes de ser intervenido tenía serias complicaciones, debía estar en constante control médico y bajo medicamentos.
“Ahora me siento en condiciones de llevar una vida cotidiana normal, puedo trabajar y estudiar. Luego de la intervención mi vida fue distinta. Tuve que viajar un par de veces a Buenos Aires para control, donde me hicieron el trasplante y ahora sigo en el Centro de Salud, haciéndome los controles”, detalló.
Finalmente, José aconsejó: “Como paciente trasplantado recomiendo esta intervención. No hay que tener miedo. Conozco mucha gente que tiene miedos pero hay que animarse porque además, es el camino más rápido para tratar este tipo de enfermedades. Lo más correcto es el trasplante de medula”, cerró.