El niño Lautaro Roldán recibe tratamiento en el Hospital de Niños desde 2013

Luego del informe emitido durante la noche de ayer en el programa de Canal América “La Cornisa”, el director del Hospital del Niño Jesús, Oscar Hilal, comentó las características del caso de Lautaro Roldán, un niño que vive en La Reducción, zona ruta 301, y que con casi ocho años de edad padece de Púrpura, una enfermedad por la que se encuentra controlado en dicha institución.

“En el año 2013 Lautaro concurrió al hospital presentando palidez, decaimiento y manchas en la piel, especialmente en miembros inferiores”, explicó el director de la institución, quien afirmó que en ese año fue diagnosticado de Púrpura Trombocitopénica Idiopática, una enfermedad hematológica por la cual se produce una falta de agregación en las plaquetas. Al respecto, dijo que esto de ninguna manera es un cáncer en la sangre. “No es una leucemia. No se trata de un paciente inmunosuprimido. En ese momento se hizo el tratamiento correspondiente con gammaglobulina y luego de unos días de internación, se procedió a su alta”, manifestó Hilal, quien destacó que el niño no regresó a control durante todo un año. “En noviembre de 2014 se tomó conocimiento, a través de redes sociales, de una campaña por la cual la mamá de Lautaro pedía una colaboración monetaria para encarar un tratamiento de lo que ella definía como un cáncer en la sangre”, prosiguió.

Tanto la jefa del servicio de Hemato Oncología del Hospital del Niño Jesús, Patricia Luna, como la médica de cabecera del servicio, Cecilia Chaya, se pusieron en contacto con la docente de la escuela de Lautaro y el agente de servicio social del centro de atención, quienes se interiorizan de la situación del menor y se logró que el niño vuelva a concurrir a controles. En la actualidad tiene cuatro controles, en los que se detecta un número bajo de plaquetas y en la fecha tenía programado el quinto control, al que no concurrió.

“Estamos frente a una púrpura crónica que no tiene ningún tipo de tratamiento y ante la que no se esperan complicaciones, siempre y cuando no transcurra tanto tiempo entre un control y otro. Este niño debe ser atendido de forma permanente”, sostuvo Hilal.

En Tucumán estimativamente se diagnostican 60 tumores y leucemias en niños por año. En casi el 98 por ciento de los casos son tratados en el Hospital de Niños y por cuenta del estado, independientemente del nivel económico y de que el paciente tenga o no obra social. “Todos los papás que hayan tenido que pelear con una enfermedad de estas características en sus hijos, saben que el hospital les brinda absolutamente todo, desde medicación hasta entretenimiento para el niño, apoyo psicológico, grupos de ayuda para los padres y las familias; ellos pueden dar fe de la atención que brindamos y del grupo de profesionales médicos y enfermeras de absoluta excelencia, que están permanentemente”, definió el funcionario.

Por su parte, el ministro de Salud Pública local, Pablo Yedlin, respecto a las denuncias de que en el caso de Lautaro se presenta un cuadro de desnutrición, enfatizó el crecimiento en materia de herramientas sociales que esta gestión garantizó, para una mejora de las condiciones de vida de la comunidad. “Cuando empezamos la gestión, la lista de chicos desnutridos en la provincia era de casi 25 mil. Hoy, a través del control de 68.000 niños por parte del Sistema Público de Salud y su programa focalizado en conjunto con el Ministerio de Desarrollo Social, se ha bajado significativamente esta cifra que nos preocupa, nos duele y de la que nos ocupamos”, manifestó.

Cabe destacar que para casos de mayor complejidad se sostiene un convenio de hermanamiento con el Hospital Garrahan, y en este marco, durante la semana pasada, se logró una derivación en tiempo récord (menos de doce horas) de un niño con leucemia de tan solo meses de edad.