Se realizó la colocación de sensores para el control de la glucemia a 6 niños en el hospital Avellaneda
Se trata de un pequeño sensor que recoge y almacena los valores de glucosa durante el día y la noche, con el mismo se obtienen los valores de glucosa con un rápido escaneo a través de la ropa. La adquisición de este equipamiento forma parte de los lineamientos del ministro de Salud, doctor Luis Medina Ruiz, quien tiene como prioridad el cuidado de las personas con enfermedades crónicas.
Sobre esto la jefa del Departamento de Enfermedades No Transmisibles, doctora Cristina du Plessis, comentó: “Es una jornada de mucha alegría ya que hemos colocado sensores freestyle a seis niños, esto significa un salto de calidad muy grande ya que este tipo de dispositivo va haciendo un registro cada minuto de la glucosa que se encuentra en el tejido intersticial y de esta forma el paciente su mamá durante la noche puede escanear ese sensor y saber cómo están los valores de glucosa”.
Y añadió: “También se colocó un nuevo dispositivo a un niñito de dos años, el sensor tiene mejoras tecnológicas como el desarrollo de alarmas de hipoglucemia, hiperglucemia y la ventaja que puede ser colocado en niños menores a cuatro años. El sensor anterior era destinado a niños de más de cuatro años, pero no hay que olvidar que la diabetes es una enfermedad crónica que puede diagnosticarse en cualquier etapa de la vida”, detalló.
La diabetes infanto-juvenil o diabetes tipo 1 representa aproximadamente el 5% del personas con diabetes y el tratamiento se basa en la educación, la alimentación y la administración de insulina. “Es fundamental este dispositivo para la educación y la alimentación ya que se pueden determinar las excursiones después de la comida, el azúcar en el tejido intersticial para tomar decisiones y no estar pinchando cuatro o seis veces el dedo del paciente. Este tipo de dispositivo también requiere de la glucemia capilar (pinchar el dedo) pero se reduce sensiblemente la cantidad de los pinchazos”.
Asimismo, la referente aclaró que esta adquisición de tecnología para mejorar la calidad de vida de los pacientes se la obtuvo gracias al apoyo del ministro, el doctor Luis Medina Ruiz. “El Ministro siempre ha estado a la par del Programa Provincial de Diabetes y este equipo multidisciplinario del hospital Avellaneda está conformado por una médica endocrinóloga, una psicóloga y una licenciada en nutrición; un equipo similar también trabaja de esta forma en el hospital de Niños y se está desarrollando otro en el hospital Regional Concepción”, enfatizó.
Por su parte la doctora Alba Pieroni, directora del efector, explicó que el hospital en conjunto al PRIS están haciendo la entrega y colocación de sensores para la medición de glucemia destinada a niños que concurren al consultorio de diabetes infanto- juvenil y de transición con el que cuenta el efector, que no es tan solo un consultorio, sino también un aula dentro de la Escuela de Pacientes.
“La ventaja que tendrán estos niños con la colocación de estos sensores en la medición de la glucemia, será la falta de necesidad de pincharse todos los días para hacerse los controles y la mayoría de nuestros pacientes son muy pequeños y dependientes para hacerse los controles ellos mismos y el trauma de pincharlos todos los días se reducirá con el uso de estos sensores”, explicó.
Testimonios:
Luciana, mamá de uno de los niños que recibió el sensor contó que para ella esto significa un gran alivio y que lo recibió con mucha felicidad ya que el niño sufre mucho al ser tan pequeño. Él es muy valiente y en la colocación del sensor no expresó ningún dolor, viene peleándola desde el 1er año que tuvo su debut y tiene una gran paciencia. Agradezco a todas las doctoras del servicio ya que son excelentes con nosotros, son un lindo equipo y las queremos mucho ya que están con nosotros desde el primer día”, afirmó.
Mateo, de 13 años, otro receptor del dispositivo contó: “Será mucho más fácil para mi ahora, antes me costaba mucho tiempo pincharme el dedo para saber cuánto tenía de azúcar, esto es más fácil y rápido. Desde hace un año que tengo diabetes y estoy muy feliz por este sensor, no me dolió nada cuando me lo colocaron y me gusta venir al hospital ya que las médicas me tratan muy bien y son muy amables conmigo”.