Salud mental en la infancia
El Ministerio de Salud Pública a cargo de Pablo Yedlin, a través del Programa de Salud Mental Infanto Juvenil, perteneciente a la División de Salud Mental de la Provincia, emitió un informe con motivo del festejo del Día del niño sobre la importancia del cuidado la Salud Mental en la infancia.
Es fácil para los padres reconocer cuales son las necesidades físicas de sus niños: nutrición, sueño, abrigo, etc. Pero los aspectos relacionados con la salud Mental no son tan evidentes. Las necesidades emocionales y mentales pueden a veces no ser tan explicitas. Así hay cuestiones a tener en cuenta para lograr un óptimo desarrollo a nivel emocional, intelectual y social. Entre las más importantes destacamos:
* La estimulación mediante el desarrollo de actividades lúdicas como ser juegos, lecturas de cuentos infantiles para favorecer el progreso del pensamiento lógico y su capacidad crítica.
* Motivar la curiosidad respetando los intereses del niño, de esta manera estimulamos su creatividad.
* Brindar oportunidades de intercambio con otros niños de su edad y en ambientes diferentes, para propiciar la capacidad de adecuarse a diferentes contextos y también el aprendizaje de las normas, su capacidad de establecer vínculos con otros sujetos.
* Dar apoyo y sostén por parte de los adultos a cargo, de esta manera fomentamos su autoestima, confianza en sí mismo a partir del reconocimiento y estimulación de sus habilidades más destacadas.
* Si es necesario corregir conductas, que no sea en público, que dicha corrección tenga la intención de modificar una actitud y no descargar la ira o el enojo.
* Supervisar el uso de televisión y nuevas tecnologías. Estas nunca deben reemplazar necesidades afectivas, vinculares y lúdicas.
* El establecimiento de límites de forma clara y coherente es necesario para el desarrollo emocional, a partir de ellos se aprende a tolerar la espera, manejar emociones e impulsos. Estos además ayudan a reforzar la autonomía.
* Hacerlo participe en las actividades del hogar como ser ordenar sus cosas, colaborar en los quehaceres para ayudarlos a asumir responsabilidades y compromisos.
* Es pertinente estar dispuesto a escuchar las inquietudes y necesidades del niño. También estar atento a cambios bruscos en la conducta del niño, estos son los uno de los indicadores más claros de estar atravesando por una situación difícil desde el punto de vista emocional. Ante cualquier duda o sospecha consultar al Centro de Atención Primaria con atención psicológica más cercano.