“La Internación como último recurso”
Con esas palabras, la directora del Centro de Rehabilitación y Reinserción Social para Adictos Las Moritas, Lucía Biazzo, sintetizó la importancia de no llegar a la internación del paciente en los tratamientos por consumo de sustancias. La especialista habló de éste y otros temas en una entrevista realizada por el ministro de Salud Pública, Pablo Yedlin, en el programa radial ‘Ondas de Salud’.
“Esta semana tenemos 42 pacientes internados. En Las Moritas se internan varones de 14 a 30 años que, por su consumo problemático de sustancias psicoactivas, no pueden llevar adelante otro tipo de abordaje, como el ambulatorio o de Hospital de Día y por eso se hace necesario ese periodo de internación para el cese de consumo”, explicó Biazzo.
Al respecto, dijo que el centro actúa puntualmente como receptor de derivaciones de otros efectores del sistema porque la ley de salud mental plantea a la internación como último recurso. “Estamos recibiendo derivaciones del Hospital Obarrio, del servicio de Adicciones del Avellaneda, Hospital Eva Perón y de todos los efectores del primer nivel, sobre todo de pacientes que tengan la voluntad de recibir el tratamiento por un trabajo en red previo”, continuó.
En la oportunidad, la directora de Las Moritas aseguró que el menor porcentaje de la totalidad de pacientes que padecen esta problemática deben ser internados, porque hay otros abordajes complejos y completos con los que el sistema también cuenta. “La efectividad de la internación es mucho más grande cuando es derivado por otro efector, porque se trata realmente de pacientes que necesitan la internación y a la vez estos vuelven hacia sus efectores base para continuar con su tratamiento, que no termina en la internación”, se explayó.
Durante la entrevista, Biazzo afirmó que el consumo de sustancias es un fenómeno dentro de los procesos subjetivos de alguien y que la idea es que el paciente pueda dejar de consumir para poder trabajar otras cuestiones desde lo personal. “Las sustancias están en el medio, no todos las consumimos, pensar eso requiere de un proceso largo que está alejado de terminar al concluir la internación”, enfatizó.
Además, la especialista consideró que siempre se genera una gran confusión entre lo que abarcan los abordajes de salud y la lucha contra el narcotráfico. “Es muy complicado que eso se separe, pero hay que aclararlo en su complejidad, que va desde lo social, lo económico, aspectos geopolíticos y va a depender de cuestiones personales y subjetivas. Todos los casos son distintos, ante una determinada problemática la sustancia puede estar o no, pero su consumo va a depender de cada uno”, finalizó.
Por su parte el subdirector del Centro Las Moritas, Marcos Zeitune, sostuvo que el paco introdujo en el ámbito de las adicciones una problemática nunca antes vista: un deterioro mucho más rápido que el que generan las otras sustancias. “El deterioro se produce en mucho menos tiempo. Es una sustancia muy económica y accesible, lo cual representa otro grave problema”, manifestó. En este aspecto, dijo que el paco se vino a instalar justamente en los lugares más vulnerables. “La solución de un problema de consumo generalizado excede a Salud, porque la prevención pasa por muchos otros sectores, como Desarrollo Social, planes Progresar o que las instituciones públicas generen que eso sea accesible para que los chicos tengan perspectivas de futuro”, expuso.
En Las Moritas se inauguró en el mes de Julio el sector de rehabilitación. Al respecto, Zeitune dijo que los espacios de reinserción social garantizan un área para que los chicos se enganchen en algún nuevo proyecto de vida: deporte, huerta, talleres de teatro y música.
En cuanto al abordaje de chicas que consumen sustancias, el subdirector del efector contó que está en manos del Hospital Nuestra Señora del Carmen, del servicio de Adicciones del Avellaneda y de los hospitales de salud mental generales como específicos o monovalentes.