Hospital Eva Perón: Siete hijos varones y una enorme esperanza
Blanca Graciela Frías, de 39 años, dio a luz a Mateo Luciano David séptimo hijo varón.
Blanca tuvo a Mateo en el Hospital de Garmendia, pero luego fueron trasladados al Hospital Eva Perón en donde el niño fue internado en el Servicio de Neonatología y su madre recibió la atención necesaria.
El pequeño pesó 3. 200 kilogramos y se encuentra en perfecto estado de salud.
Blanca es una mujer muy serena, sonríe ampliamente cuando habla de sus hijos y muestra un enorme orgullo cuando cuenta que cada uno de los chicos colabora en las labores de la casa: “mis hijos todavía no conocen a su hermanito Mateo, mi casa queda lejos del hospital y algunos todavía son muy chiquitos (sus hijos tienen 20, 16, 11, 10, 6 y 4 años) pero ya me imagino como lo deben estar esperando”.
Carlos Rodolfo Jiménez (52), el padre, se muestra tan feliz y orgulloso como ella: “somos una familia grande y nos ayudamos entre todos”. Este es su segundo matrimonio. Del primero Carlos tiene 10 hijos y con Blanca siete son las raíces que lo ligan a esta tierra.
“El sábado 9 de noviembre a las 8 comencé con los dolores de parto. Estuvimos en la parada hasta que llego el colectivo y a las 10 nació Mateo con 3.200kl. en el Hospital de Garmendia. Me asombro que al ratito no más ya estuviera la ambulancia esperándonos para traernos al Hospital Eva Perón”.
“Los médicos me revisaron- sigue diciendo Blanca- se aseguraron de que haya salido toda la placenta (por eso me mandaron desde allá un poco asustados) y Mateo fue internado en el servicio de neonatología. Cuando estuve mejor ya tenía una cama esperándome en el Hogar de Madres, así que me quedaba cómodo ver a mi hijo a la hora que yo quisiera o quedarme con él toda la noche mirándolo”.
Blanca expresó que le sorprendió que los médicos estuvieron pendientes de su hijo y lo revisaban cada hora y agregó “ahora que está todo bien finalmente llego el momento de reunirse con el resto de la familia”.
“Mi casa es pequeña, tiene un patio grande, una habitación, una cocina a leña y un baño. Hacen falta muchas cosas – dice Carlos, emocionado y finalmente agrega – ya nos vamos a casa, nos están esperando”.