Delfina: una historia para celebrar la vida
En el marco de las celebraciones que realiza el Ministerio de Salud, a cargo de la doctora Rossana Chahla, en el Instituto de Maternidad y Ginecología “Nuestra Señora de las Mercedes”, la historia de Delfina Rosales Buffo es un ejemplo a seguir para muchas familias que están pasando por experiencias similares.
María Fernanda Buffo, mamá de Delfina, contó que durante su embarazo tuvo síndrome antifosfolipídico (SAF), comúnmente llamado trombofilia. Esta enfermedad afecta al sistema inmunológico y puede causar pérdidas de embarazos precoces o tardíos. En líneas generales, se produce por la presencia de unos anticuerpos en la sangre que alteran los mecanismos de coagulación. Esto puede complicar el embarazo con hipertensión arterial o falta de crecimiento adecuado del bebé.
“Luego de que me hicieron un eco doppler, que no salió bien, llegue a la Maternidad de urgencia, donde me internaron y me realizaron una cesárea de emergencia. Delfina nació el 13 de octubre del 2013 con 30 semanas de gestación y pesando 1.080 kilos”, explicó María.
La nena pasó sus primero 50 días de vida internada en la Maternidad; primero estuvo en terapia intensiva y luego en el Servicio de Neonatología. Hoy tiene 3 años y su evolución es un ejemplo a seguir para muchas familias que están pasando por la misma situación.
“El apoyo que recibí en la Maternidad fue excelente; estuvieron presentes desde antes de que nació mi bebé. Al nacer me contuvieron y ayudaron porque al vivir en el interior de la provincia, durante los meses que estuvo internada Delfina, me alojaron en la Casa de Madres, donde además el servicio de psicología sostuvo a nuestra familia”, sostuvo María.
En este sentido, la mamá de Delfina destacó que mientras su hija crecía los controles fueron disminuyendo. Cuando le dieron el alta, los chequeos se realizaban cada 15 días. Luego una vez al mes y actualmente es anual.
La jefa del Servicio de Neonatología, doctora Gloria Ferreyra, resaltó que el Instituto de la Maternidad es abierto y centrado en la familia. “Para que la recuperación sea rápida, es muy importante el acompañamiento de la familia. Es por eso que los padres pueden estar con su bebé las 24 horas y en el caso de familiares, solo en los horarios de visita y con una preparación previa”, indicó Ferreyra.
Por último María, mamá de Delfina, aconsejó a todos los papás que tienen un hijo prematuro confiar. “Los profesionales de la Maternidad hacen todo lo humanamente posible, por lo que deben entregarse a ellos y pedir a Dios fuerzas para poder sobrellevar ese momento que es tan difícil”, concluyó.