“Gracias a la operación que recibí pude retomar una vida normal”
Así lo afirmó Rosario Zelarayán, una joven de 21 años que sufrió un accidente de moto en el mes de abril, que revistió gravedad debido a que no usaba casco en el momento en que ocurrió. Tras 4 intervenciones en el Sistema Público y un largo recorrido de recuperación, Rosario retomó su vida normal.
“No recuerdo nada de lo que pasó ese día por los golpes que recibí en la cabeza durante el accidente. Esto sucedió en el mes de abril mientras circulaba en mi moto. Mis familiares me contaron que ingresé por guardia y fui derivada a quirófano, donde los neurocirujanos Álvaro Campero y Martín Paiz decidieron realizarme una craniectomía para descomprimir la zona”, relató Zelarayán.
Al respecto, los profesionales intervinientes explicaron que una craniectomía es un procedimiento quirúrgico en el que parte del cráneo se elimina para otorgar espacio para expandirse a una inflamación del cerebro. La parte del cráneo que se extrae se llama hueso de solapa o colgajo óseo.
Prosiguiendo con su relato, Rosario manifestó: “Sé por mis familiares que estuve en terapia intensiva, en coma casi un mes; como tuve una recuperación rápida me pasaron a sala y los profesionales me indicaron qué cosas podía hacer y cuáles no”. Eran varias las limitaciones que Rosario sufrió en su vida diaria y en ese sentido contó: “Sé que tuve varias cirugías para superar las secuelas, pero gracias a Dios en la cuarta y última que me realizaron en el mes de octubre, me colocaron una prótesis de titanio en la parte derecha, para reemplazar el hueso temporal que perdí”.
Antes de la última intervención Rosario debía tomar precauciones en sus actividades más cotidianas. “Al colocarme la prótesis pude retomar una vida normal. Trabajar, estudiar y hacer cosas que antes no podía realizar, sin miedo”, afirmó la paciente.
En cuanto a la atención recibida en el Hospital, Rosario sostuvo:
“No tengo palabras, siempre estaré agradecida con los profesionales que me asistieron por el calor humano que me brindaron, así como con todo el personal. Para mí la atención fue espectacular, yo lo comparo con otros lugares donde hay gente parada sin hacer nada. Acá no hay tiempo para eso, la atención al paciente es primordial para el Padilla”, finalizó.