‘Hormonas de Crecimiento’ se realizan pruebas gratuitas y diagnósticos
Desde hace un mes, el servicio de Endocrinología Infantil del hospital de Clínicas Nicolás Avellaneda, realiza a pacientes que tienen talla baja pruebas de laboratorio que diagnostican deficiencias en las hormonas de crecimiento a nivel hipofisario (este cumple la función de mantener la regulación y equilibrio de los niveles hormonales).
Una de estas pruebas, la de clonidina, es única en el sector público y se pusieron en marcha por disposición del Ministerio de Salud Pública, a cargo de la doctora Rossana Chahla y por la dirección del efector a cargo de los doctores Luis Medina Ruiz y Miguel Ferre Contreras.
Sobre el tema el sub director del Avellaneda, doctor Ferre Contreras, dijo: “Es un nuevo estudio que se incorporó en nuestro laboratorio. Somos el único hospital público que cuenta con ello porque hasta el día de la fecha solo podía hacerse en el sector privado. El procedimiento tiene como objeto determinar cuáles son los niveles de hormonas del crecimiento en los chicos para comprobar si está relacionado con su crecimiento normal”
Hasta el momento se están realizando tres pruebas de acuerdo a lo informado por la referente del Servicio, doctora María Verónica Felipe Gacioppo, quién además remarcó “Es importante consultar por una talla baja, no solo por un tema estético sino porque puede implicar algunas enfermedades graves. Pueden pasar años desapercibidas y con un diagnostico precoz cambia el futuro de ese niño”.
Pasos que se debe hacer para diagnosticar la problemática.
Cuando el paciente llega al Servicio de Endocrinología, sin derivación, ni análisis previo del pediatra, lo primero que realiza el efector es una batería de laboratorios de sangre y una placa de mano para controlar la edad ósea y evaluar si la misma está acorde a su crecimiento.
Con esta información, se descartan las enfermedades más frecuentes, entre las que se puede mencionar hipotiroidismo, enfermedad celiaca, renal y hepática. Si los exámenes son normales el paciente pasa al segundo escalón que es descartar la deficiencia de hormona de crecimiento. Para eso se hace la prueba de estímulo que se realiza en el hospital.
¿Qué es la prueba de estímulo de crecimiento?
El paciente es internado en la sala de pediatría, donde posteriormente se le extrae una muestra de sangre en ayunas, luego se le da una medicación, que actúa como estimulante de la secreción de la hormona: Clonidina en comprimidos (que se adquiere en Brasil ya que no está disponible en Argentina) o Arginina que es un aminoácido que se coloca por vía endovenosa (adquirido solamente en Buenos Aires).
Se coloca un abbocath intermitente, donde el técnico de laboratorio va sacando las muestras de sangre sin necesidad de pinchar nuevamente al paciente. Se realizan varias extracciones (en algunos casos se hacen hasta cinco). Si en la primera prueba los resultados son normales, se descarta que tenga déficit de hormona y probablemente la causa sea talla baja variante de la normalidad (retardo constitucional del crecimiento y desarrollo, o talla baja familiar).
Por el contrario, si la prueba de estimulo da negativa, se realiza una segunda prueba de confirmación utilizando arginina, en caso de ser negativa, se diagnostica un déficit de la hormona de crecimiento.
“Una vez confirmado el diagnostico, se realiza una resonancia magnética de cerebro con un contraste especial (de la región hipotálamo hipofisiaria) para ver porqué la glándula no está produciendo la hormona. Una vez realizado este estudio, se descarta que no haya tumoración ya que es una de las causas de deficiencia de hormonas de crecimiento, estas pueden benignas o malignas a nivel de la glándula hipofisiaria” explicó Felipe.
Y continuó: “Una vez que se descartan tumores, empezamos con el tratamiento que se hace a través del ‘Programa de Enfermedades Poco Frecuentes del Ministerio de Salud de la Nación.’ que asiste a los pacientes que tienen deficiencia de hormona de crecimiento y a través del mismo se cubre el tratamiento posterior del paciente un cien por ciento”.
Cabe destacar que, este es un trabajo interdisciplinario donde participan varios servicios como ser: el laboratorio central a cargo del doctor, Ramón Gandur, enfermería y el endocrinólogo infantil. Al resultado se lo tiene en 48 horas. A estas prueba se las hace una vez a la semana con turno programado, se interna una noche antes, a las 8 comienzan con la prueba y extracciones. El paciente se queda hasta el medio a día para ver las reacciones y cómo evoluciona ya que puede presentar disminución de la frecuencia cardiaca y baja de la presión arterial.
Al respecto Ferre Contreras expresó: “Estamos muy contentos porque esta es una posibilidad que un establecimiento público no podía brindar anteriormente. Esta necesidad la veíamos muy seguido en el consultorio de endocrinología de la doctora Felipe, siendo ella misma la que nos presentó la idea con el fin de incorporarlo conjuntamente con el servicio de pediatría y con nuestro laboratorio”
Colocación de hormonas
“Estas se colocan por vía subcutánea todos los días, de lunes a sábados por la noche, el paciente descansa solo el domingo. El objetivo es llegar a una talla normal, adecuada al rango genético. La edad de finalización depende de la edad ósea” extendió Felipe.
Para tener en cuenta: Talla baja
Se considera cuando el niño tiene talla para la edad por debajo de percentilo 3 de acuerdo a las tablas de la Sociedad Argentina de Pediatría o también por debajo del rango objetivo genético que es una fórmula que se saca entre la talla paterna y materna. Entonces si el niño crece por debajo de su rango genético también se considera talla baja.
“El niño que tiene talla baja generalmente consulta al pediatra que es el que hace el control de crecimiento y desarrollo y el que diagnostica por primera vez este problema. Allí su tarea es descartar las enfermedades más frecuente de talla baja. Es decir el primer escalón del diagnóstico, algunas veces son las maestras o, la familia los que notan la talla baja” explicó Felipe.
Por su parte, Patricia Heredia, mamá de Leandro, un pequeño de 12 años que está haciendo la prueba, contó: “Llegué aquí por medio de la doctora Villafañe, del CAPS de Villa 9 de Julio. Ella notó que la talla y peso no subían y de ahí me derivaron a este hospital. Desde ese momento le realizan los estudios, por eso estoy muy agradecida con el trato que tiene la doctora y las enfermeras. Quiero que sepan que esto es totalmente gratuito”, concluyó.