Es favorable la evolución del joven paciente embolizado por hemorragia pulmonar
Al cumplirse el primer año de la embolización de arterias bronquiales por hemorragia pulmonar en un paciente de 17 años, los profesionales intervinientes cuentan detalles de la compleja intervención sin precedentes que se practicó en la provincia.
El servicio de Hemodinamia del hospital Padilla, dependiente del Departamento Neurocardiovascular a cargo del doctor Pablo Pillin, cuenta en su equipo con los cardiólogos y angiólogos intervencionistas Luis García Nielsen, Rafael Feldman y Gerardo Padilla.
García Nielsen brindó detalles acerca del caso del paciente de 17 años, oriundo de la provincia de Santiago del Estero, que ingresó por derivación en estado crítico al hospital, con un severo sangrado bronquial por el cual requirió de varias unidades de glóbulos rojos de transfusión.
Por las características que presentaba el cuadro, se sospechaba de una tuberculosis pulmonar que fue confirmada posteriormente al momento de la intervención. “La enfermedad le produjo un sangrado activo que puso en riesgo su vida. Se nos pidió una evaluación y emprendimos el procedimiento que nunca se había practicado en el sector público de la salud y que incluso no tenemos conocimiento de que haya tenido lugar en la parte privada de la provincia”, afirmó.
La labor se ejecutó de forma multidisciplinaria. Inicialmente se realizó una arteriografía, buscando las arterias que podían ser causantes del sangrado y posteriormente se procedió a la embolización selectiva de todos los focos pulmonares.
“La embolización permitió cortar el flujo sanguíneo arterial de la zona, lo cual disminuyó notablemente el sangrado, la necesidad de transfusión y permitió la estabilización del paciente. Posteriormente el equipo de cirugía torácica pudo operar y resecar la zona gracias a que tuvieron una mejor visualización de toda el área afectada”, sostuvo García Nielsen.
Por su parte, Gerardo Padilla destacó la comunicación entre las terapias de los hospitales de ambas provincias, la interconsulta y el diálogo que permitió que se avanzara ágilmente sobre el traslado del paciente, además del hecho de contar con el angiógrafo digital de última generación que posibilita este tipo de trabajo de alta complejidad y precisión.
“El estado en que el paciente ingresó produce por lo general un índice de mortalidad muy alto, ya que no hay forma de parar las hemorragias. Es un punto a destacar el trabajo interdisciplinario. La terapia intensiva tuvo la agilidad suficiente en la emergencia de pensar en esta opción terapéutica, contactarnos, solicitamos los materiales, y pudimos estudiar y revertir la situación rápidamente”, dijo Padilla.
Los profesionales hicieron hincapié en la labor de los equipos de Terapia Intensiva II del hospital y de Cirugía Torácica, encabezado por los doctores Juan José Anastasio y Héctor Eduardo Roldán, que extrajeron una parte del pulmón con muy buenos resultados.
El paciente luego volvió a control con clínica médica y cirugía torácica y, al cumplirse el primer año desde la intervención, lleva una muy buena evolución clínica y una vida normal.