Alertan sobre el incremento en el consumo de alcohol durante la pandemia
La jefa interina del servicio de Gastroenterología del hospital Centro de Salud, médica gastroenteróloga y hepatóloga Claudia Gadea, advierte sobre los problemas aparejados por el aislamiento durante la cuarentena y su relación con las bebidas alcohólicas.
“La pandemia hizo que muchas personas pierdan sus hábitos saludables al estar en aislamiento. La gente ha incrementado el sedentarismo que está vinculado con el síndrome metabólico, el hígado graso, la diabetes, y el consumo de bebidas alcohólicas. Eso desgraciadamente va en deterioro de la función hepática. Con el consumo crónico de alcohol, se puede evolucionar hacia una cirrosis”, sostiene la referente.
De este modo, explica, los pacientes con patologías por alcohol tuvieron una recaída de su adicción durante la pandemia. “Tal vez no lo veamos ahora, pero probablemente y a medida que se vayan activando más los consultorios externos, tengamos más pacientes con consultan por cirrosis descompensada, por hígado graso vinculado al alcohol. Creo que habrá que hacer campañas fuertes de concientización para disminuir el consumo de bebidas alcohólicas”, sostiene la profesional.
Respecto a quiénes afecta mayormente esta enfermedad, aclara que la población joven no va a ver las consecuencias inmediatamente. Sin embargo, el grupo etario más complicado es aquel que ronda los 50/60 años, hacia adelante. Esto se da porque por lo general, esta población ya presenta alguna patología crónica como ser diabetes o hipertensión, y sobre eso se agregaría el consumo de alcohol.
Existen dos poblaciones bien diferenciadas en el consumo de alcohol:
– La persona que tiene un consumo de alcohol social crónico, sólo toma los fines de semana
– La persona que consume alcohol diariamente, alrededor de más de 30 gramos de alcohol diario, dos vasos grandes de vino por día por ejemplo.
“La cirrosis es la enfermedad hepática crónica terminal, independientemente de la etiología, ya sea por virus, alcohol, tóxicos, enfermedad autoinmune; la cirrosis es la enfermedad terminal del hígado. El paciente si no sabe que tiene cirrosis puede tener un debut agudo con una hemorragia digestiva alta o vómito de sangre, trastornos de coagulación (moretones espontáneos, le sangran fácilmente las encías), se ponen amarillosos bruscamente, o trastorno de la esfera de la conciencia. Una vez que está instalada la cirrosis y el paciente hace un consumo duro del alcohol, hablamos de más de 20 gramos de alcohol diario en mujeres y más de 30 gr en hombres, eso va a provocar que se aumente la cirrosis con altas chances de mortalidad en las siguientes 24 a 48 horas. Es un problema social alarmante”, señala.
Es así que, invita a todos los ciudadanos que presenten algún síntoma o necesiten ayuda, a asistirse con los profesionales del servicio. Pueden pedir un turno presencial a través de Salud Escucha (0800-4444-999).