Comenzaron las jornadas de actividad física en el Avellaneda
En el marco del lanzamiento de las actividades para pacientes con enfermedades crónicas, en el Hospital Avellaneda comenzaron las jornadas de hábitos saludables destinadas a personas con patologías como diabetes, tiroides, obesidad, entre otras.
“Este es el cuarto año consecutivo que realizamos actividad física para pacientes con enfermedades crónicas. Puede venir al hospital los martes y jueves y próximamente los miércoles, donde además se enteran de los talleres”, contó el director del Avellaneda, doctor Luis Medina Ruíz. En este sentido, consideró que un centro de salud no es solo un lugar donde van los enfermos, sino que también debe ser un espacio donde las personas que asistan quieran permanecer sanas. “Vimos que hay muchas patologías que necesitan un acompañamiento psicológico, un espacio donde se los escuche y puedan compartir con otras personas que tengan la misma enfermedad”, agregó.
El encargado de llevar adelante estas actividades es el Programa de Educación Diabetólogica. “Cuando nos reunimos con el director, él nos abrió las puertas para que el efector brinde asistencia médica a los pacientes con enfermedades crónicas y para proveerles todo el tratamiento no farmacológico, que incluye todos los aspectos nutricionales y además la actividad física”, expresó la médica diabetóloga del Avellaneda, Fernanda Rodríguez.
Cabe destacar que todas las personas que participan en las jornadas fueron captadas desde el consultorio de diabetes y de endocrinología. Se los invita recalcando la importancia que tiene tomar las pastillas que necesitan, llevar adelante las pautas nutricionales y realizar gimnasia.
Los talleres de educación física son los martes y jueves de 8:30 a 9:30 horas. Después de la clase de los jueves, se dan talleres de educación diabetólogica y cada 15 días se realiza control de peso y se refuerza lo que se enseñó. Al final de cada año se hace una devolución a cada paciente.
“Ahora somos como 50 personas y en un medio hospitalario este número es muy importante porque todo esto se trasmite de boca en boca. No tenemos un sistema telefónico que los llame o que los convoque. Acá se puede ver padres con sus hijos, abuelas con nietos y grupos de vecinas que se acercan a este gimnasio comunitario, donde se enteran que también pueden ser atendidos para patologías como la diabetes, tiroides, obesidad, entre otras”, se explayó Rodríguez.
Por su parte, el profesor de gimnasia del Programa Integrado de Salud (PRIS), Gustavo Toledo, dijo que la idea es darle a la gente el sentido de pertenencia para este año que comienza. “Queríamos que la gente tenga su espacio para hacer un desayuno saludable y actividad física. Si esto se sostiene, los pacientes pueden mejorar su calidad de vida a pesar de su patología”, aseguró.