Cómo trabaja el servicio de Prevención y Asistencia a las Adicciones
Hace más de 20 años brinda a la sociedad tucumana una respuesta humanitaria y profesional sobre la problemática del uso de las drogas.
Totalmente gratuito y público, el servicio de Prevención y Asistencia a las Adicciones del hospital Nicolás Avellaneda funciona desde 1994. Está compuesto por un equipo interdisciplinario integrado por psicólogos, psiquiatras, una médica clínica generalista, terapistas ocupacionales, profesores de educación física, talleristas de arte y una trabajadora social.
Sobre esto, el subdirector del establecimiento, doctor Miguel Ferre Contreras, comentó: “Es un servicio que tiene muchos años de experiencia y es referente en la provincia. Se destaca por una gran sensibilidad humana. Trabaja en un área que es a veces complicada de abordar pero se caracteriza por el compromiso humano de querer ayudar al prójimo que está en una situación problemática que requiere un tratamiento largo, prolongado y de mucho compromiso”.
Por su parte, la psicóloga Paola Vásquez, miembro del servicio, contó: “Recibimos a pacientes que están inmersos en esta problemática y también a sus familiares. Y damos asistencia a todo tipo de adicciones, incluyendo el consumo de alcohol y la ludopatía. Según nuestro registro estadístico, durante el 2017 atendimos 12.002 consultas y llegamos a este número por ser un tratamiento integral complejo que tiene diferentes aristas y causales”.
El primer paso del tratamiento consiste en la admisión (ingreso del paciente al servicio) donde hay una respuesta a la demanda espontanea, siendo atendida en el día. Se escucha a la persona, se realiza una evaluación para delimitar un diagnóstico presuntivo y, de acuerdo a su situación particular, queda en el servicio o es derivado donde corresponda.
Dentro de las actividades que realizan los pacientes se encuentran talleres de escritura (con la publicación anual de una revista), de educación física, música, entre otros. Todos ellos con un claro objetivo terapéutico.
La consulta espontanea se puede realizar de lunes a viernes de 7.30 a 18 horas en el efector (México 977 – San Miguel de Tucumán), donde se recibe al paciente o también algún familiar que solicite asistencia.