Con todos, entre todos y para todos, el suicidio se puede prevenir
Con esa consigna el servicio de Salud Mental del hospital Regional de Concepción realizó una jornada de concientización y sensibilización sobre el suicidio, dando a conocer también el trabajo que realizan con una asistencia integral a pacientes y también a sus familiares.
Cada año mueren más de 800 mil personas en el mundo a causa del suicidio. Por eso es que desde la Organización Mundial de la Salud establecieron el 10 de septiembre como el Día Mundial de Prevención del Suicidio, con el objetivo de fomentar compromisos y medidas prácticas para prevenirlo. En este marco, desde el servicio de Salud Mental del hospital de Concepción desarrollaron una jornada de concientización y promoción a pacientes mientras aguardaban ser atendidos.
La licenciada Ivana Hernández es una de las psicólogas del servicio, referente en suicidio, y detalló: “Se colocó un stand de ingreso, se entregó folletería, informando sobre el tema y también dando a conocer nuestro trabajo como una medida también preventiva, para que la gente conozca lo que el sistema les ofrece para atender este tipo de cuadros”.
El servicio de Salud Mental está integrado por psiquiatras y psicólogos quienes se encargan de las interconsultas que solicitan desde la guardia, donde reciben los pacientes que han tenido una ingesta de medicamentos o algún episodio de autolesión. “En ese momento se hace la consulta psiquiátrica y también psicológica, en caso de ser necesario se lo interna y se sigue el tratamiento”, especificó Hernández.
En caso que el paciente quede internado se continúa un seguimiento permanente hasta que se resuelve el alta médica, tras esto el tratamiento continúa pero ya de manera ambulatoria, es decir en consultorios externos. “Se trabaja también con la familia, conteniéndolos, explicándoles también los pasos a seguir para que puedan acompañar al paciente”, añadió la profesional.
Desde 2009 Tucumán cuenta con el Programa de Prevención y Abordaje de Conducta Suicida, que despliega diversas estrategias para reforzar la concientización y sensibilización sobre la temática, lo que se ha traducido en una reducción de la tasa de suicidios consumados y en un aumento en las consultas por tentativa, conducta o ideación suicida, un claro indicado que el sistema está respondiendo a la situación. “Tuvimos un gran incremento en estos últimos cuatro años de pacientes, por eso es necesario que la población conozca nuestro trabajo para que sepan que pueden recibir la atención que necesitan en nuestro servicio”, destacó la psicóloga.
Algunos de los síntomas
Hay varias señales que pueden identificar conductas, pensamientos o ideación suicida, como por ejemplo cambios de comportamientos, altibajos emocionales, sueño constante o insomnio, ansiedad o depresión, acciones autodestructivas y cambios también en la alimentación. “También es necesario tener en cuenta si la persona atraviesa algún problema familiar o si padece alguna adicción”, agregó Hernández.
La familia cumple un rol muy importante en el tratamiento y también en la prevención, ya que se ha comprobado que los lazos afectivos reducen el riesgo de suicidio, mientras que el aislamiento social lo aumenta. “Cuando el paciente está internado trabajamos mucho con la familia, les explicamos la importancia del acompañamiento, que en la casa traten de no dejarlos solos y de generar espacios de escucha para que puedan hablar en la medida que siguen el tratamiento psicológico y psiquiátrico”, puntualizó la profesional.
