“Con voluntad y compromiso se puede salir adelante”
Fueron las palabras de Manuel Lázaro Longo, un donante voluntario y habitual de plaquetas por aféresis que concurre cada mes al Hospital Padilla para ayudar a quienes más lo necesitan.
Manuel decidió contar su historia. Sus palabras manifestaron la fortaleza que se necesita para enfrentar los momentos difíciles y demostró que con fe, amor y perseverancia todo se puede lograr. “En mayo de 2013 le diagnosticaron a mi hija de 6 años leucemia. Y tras someterse al tratamiento de quimioterapia, comenzó a necesitar transfusiones de plaquetas, así que ahí fue cuando decidí comenzar a donar sangre por aféresis, como una forma de ayudarla”.
Actualmente, Candela ya no necesita de la donación de su padre debido a que viene respondiendo exitosamente a la quimioterapia y en el porvenir mes de marzo recibirá finalmente el alta médica. A pesar de ello, Longo decidió seguir visitando el servicio para donar plaquetas y ayudar a todos aquellos que están pasando por su misma situación.
Junto a mi familia -reveló- “nunca perdimos la fe y la confianza en los médicos que nos ayudaron y permitieron que hoy mi hija esté muy bien de salud. Es por ello, que hoy junto a mi hija (Lourdes) queremos donar plaquetas no sólo como una forma de ayudar sino también para concientizar a la población de que no hay que tenerle miedo a la donación porque es un acto sencillo, seguro, que no duele y salva vidas”.
La mirada de los especialistas
Sobre este tema, habló la jefa del servicio de Hemoterapia del Hospital Padilla, doctora Felicitas Agote, quien informó que la aféresis es una modalidad de donación de sangre en la que se separan los diferentes componentes de la sangre (plasma, plaquetas y glóbulos rojos). Es un procedimiento que se realiza con una máquina que incorpora un sistema de centrífugas adaptado que separa el plasma y/o las plaquetas del donante y posteriormente se le devuelven por la misma vía de acceso los demás componentes, fundamentalmente los glóbulos rojos.
“El Hospital Padilla de Tucumán cuenta hace más de un año con una moderna máquina de aféresis -única en el sector Público del NOA- que está diseñada exclusivamente para separar desde el principio los hemocomponentes garantizando la máxima seguridad tanto para el donante como para el receptor”, explicó la médica. El producto final que se obtiene -añadió- “es el equivalente a una dosis terapéutica, es decir, que de las plaquetas de una donación se pueden extraer alrededor de 12 a 15 unidades de donantes habituales de sangre”.
En este marco, informó que “se realizaron más de 580 donaciones de plaquetas lo que permitió que muchos paciente oncológicos puedan recibir un soporte transfusional frecuente durante su tratamiento”.
En tanto, la doctora Graciela Ávila del Banco Central de Sangre brindó detalles sobre el trabajo conjunto que realiza dicha dependencia con el servicio de Aféresis del Hospital, al tiempo que explicó el procedimiento desde que el paciente concurre al servicio con la voluntad de donar: “lo primero que se realiza es una entrevista para efectuar un análisis clínico del paciente, luego se le toma una pequeña muestra de sangre para verificar que no presente ninguna enfermedad, cuyos resultados determinarán si está apto o no para donar”.
En este sentido, notificó si el paciente está en condiciones se procede a la extracción propiamente dicha, la cual dura aproximadamente entre 40 y 90 minutos y que se inicia con un pinchazo en la vena que se conecta a la máquina que procesa la sangre, separa las plaquetas, las almacena en una bolsa y restituye los demás componentes recogidos.