Concientización e inclusión en el Día Mundial del Síndrome de Down
‘No dejar a nadie atrás’ es el lema bajo el cual se desarrollaron distintas actividades para conmemorar la fecha, resaltando principalmente que todos tenemos los mismos derechos y posibilidades de disfrutar vidas plenas, en igualdad de condiciones.
En el marco del Día Mundial del Síndrome de Down, la Unidad de Atención Temprana del hospital Nicolás Avellaneda realizó una charla-taller, que estuvo encabezada por el doctor Pedro Rotger y la psicóloga Jorgelina Sastre.
El director del efector, el doctor Luis Medina Ruiz, destacó el trabajo de la unidad coordinada por la licenciada Sandra Ocampo. “Es un trabajo diario y silencioso con niños que nacen con algún tipo de discapacidad, y desde edad muy temprana intervienen para mejorarles su futuro”, destacó.
Ocampo hizo hincapié en la importancia de la estimulación temprana, explicando que se trata de un proceso terapéutico que inicia lo más pronto posible en bebés y niños con algún tipo de trastorno en su desarrollo, y también en quienes tienen riesgo de padecerlo. Esto incluye aportar a la familia las herramientas necesarias para que el niño se vaya desarrollando lo más armoniosamente posible, bregando siempre por el lugar que ocupa en la familia, en la escuela, y en todos los espacios sociales.
La etapa inicial puede ser muy difícil para los papás. Lo fundamental es recurrir a los profesionales indicados que realizan un trabajo interdisciplinario, para poder intervenir en las distintas áreas del desarrollo del niño, cubriendo el aspecto motriz, cognitivo, socio-afectivo y lingüístico. Se trata de acompañar a los padres en este proceso para que sus hijos logren una mejor inclusión en el futuro.
Cambio de paradigma
Desde 2012 la Asamblea General de las Naciones Unidas designó el 21 de marzo como Día Mundial del Síndrome de Down para aumentar la conciencia pública en torno este trastorno genético causado por una copia extra del cromosoma 21 (o una parte del mismo), en vez de dos habituales.
Hubo un importante cambio de paradigma que nos permitido como sociedad avanzar en esa toma de conciencia. “Estamos en un modelo social donde la mirada ya no está centralizada en el déficit de la persona sino en lo que nosotros hacemos para formar parte de ese concepto”, señaló Ocampo.
Hay barreras que en la mayoría de los casos tienen que ver con el desconocimiento y temores, pero también, añadió la licenciada, hay gente especializada que pueden ir sosteniendo todos estos procesos en el ámbito de la salud, de lo educativo y familiar. Por esto Ocampo resaltó la participación de la charla taller que realizaron en el hospital Avellaneda de profesionales de Salud Mental, que acompañan a la familia.