Día Internacional de la Dislexia: Detectar a tiempo y acompañar con empatía puede cambiar una vida

El 8 de octubre se celebra esta fecha y es una gran oportunidad para concienciar a las personas acerca de este trastorno que afecta al 10% de la población mundial, según la Organización Mundial de la Salud.
El Día Mundial de la Dislexia tiene por objetivo la visibilización de una dificultad en el aprendizaje que consiste en un trastorno específico de la lectura, que afecta la oralidad, la capacidad para la comprensión lectora, el reconocimiento de palabras escritas y la elaboración de tareas escritas
En este marco, la licenciada Nancy Costello, fonoaudióloga especialista en neurolingüística e integrante de la Unidad de Fonoaudiología del Hospital Avellaneda, brindó detalles sobre este trastorno del neurodesarrollo que afecta las habilidades lectoras y de escritura de muchos niños y adolescentes.
“La dislexia es un trastorno neurobiológico que se manifiesta desde etapas tempranas del desarrollo infantil, principalmente en la evolución del lenguaje. Los primeros signos pueden observarse incluso antes del ingreso escolar, como dificultades para evocar palabras, confusión de términos, o problemas para elaborar frases completas. En oportunidades el niño intenta decir una palabra y no le sale, por ello la describe como ejemplo: que quiere algo redondo cuando lo que solicita es una pelota”, ejemplificó Costello.
Estas dificultades, que suelen pasar inadvertidas en la primera infancia, comienzan a evidenciarse con mayor claridad al iniciar la escolaridad. “En la etapa preescolar notamos que les cuesta reconocer colores, números o comprender nociones espaciales y temporales. Ya en primer grado, la lectura y la escritura se vuelven un gran desafío”, explicó.
Dentro de los tratamientos la licenciada destacó la importancia de contar con la Ley Nacional 27.306 que apunta al abordaje de las dificultades específicas de aprendizaje y que contempla el derecho del niño a adecuaciones en el espacio escolar, además del apoyo y aval del Ministerio de Salud, a cargo del doctor Luis Medina Ruiz quien contempla como uno de los pilares de su gestión, la atención la primera infancia.
La especialista subrayó la importancia del trabajo interdisciplinario para lograr un diagnóstico preciso, la evaluación debe realizarse junto a psicopedagogos y psicólogos, ya que es necesario confirmar que el niño tiene un coeficiente intelectual dentro del rango medio. No se habla de dislexia si existe un retraso cognitivo general.
Entre los signos más visibles, Costello mencionó la lectura lenta y con errores, la escritura con omisiones o sustituciones de letras, y la tendencia a juntar o separar indebidamente las palabras. “Estos problemas impactan directamente en la comprensión lectora y en el rendimiento escolar, hay chicos que llegan a la secundaria sin saber que tienen dislexia y son rotulados como vagos o desinteresados, y eso afecta profundamente su autoestima”, advirtió.
La especialista también se refirió a la problemática en la provincia y sobre esto detalló que se estima que alrededor del 15% de la población escolar presenta dislexia o alguna dificultad específica de aprendizaje. La pandemia, con la interrupción de la educación presencial, profundizó aún más estas diferencias.
Finalmente, Costello destacó que, con un diagnóstico temprano y un abordaje adecuado, los niños pueden desarrollar plenamente su potencial. “No se trata de falta de esfuerzo. Se trata de comprender que el cerebro disléxico aprende de otro modo. Detectar a tiempo y acompañar con empatía puede cambiarles la vida”, cerró.