El CIC Vial III profundiza sus conocimientos para tener un rol contenedor
“La detección precoz y el abordaje oportuno de estas enfermedades realizado desde el primer nivel de atención es fundamental, pues los profesionales realizan el primer diagnóstico y luego pueden derivarlos para tratamientos específicos en otras instituciones tanto públicas como privadas”, afirmó Daniel Farías, médico de familia y miembro fundador de la Fundación Ayuda al Niño Autista (ANIA), quien destacó la importancia del rol contenedor y de puerta de entrada al sistema de salud del primer nivel de atención para las familias de niños con esta problemática.
Siguiendo esta línea, el profesional alertó a los efectores de salud sobre el alcance y prevalencia de estas enfermedades en la población: “Uno de cada ochenta y ocho niños padece Trastornos del Espectro Autista (TEA). El gran desconocimiento de la patología deriva en un diagnóstico tardío, y esto se suma a que la sociedad no está concientizada y las políticas en salud suelen estar enfocadas en otros problemas”.
El día 21 de noviembre se llevó a cabo en el Centro Integrador Comunitario Vial III, un encuentro sobre TEA bajo el título “Una mirada subjetiva desde la APS”, destinado a psicólogos y fonoaudiólogos del Área Operativa Sudoeste, residentes de Medicina Familiar, Pediatría, Psicología y Psiquiatría, Practicantado Menor dependiente de la UNT y personal del Centro de Desarrollo Infantil (CDI). Este encuentro estuvo organizada por el Centro de Educación Permanente en Pediatría Ambulatoria Integral (CEPPAI).
La directora del CIC VIAL III, Verónica Buiatti, destacó como un hecho positivo que el pasado 19 de noviembre se haya sancionado en el Congreso de la Nación la Ley para el abordaje integral de las personas con espectro autista, declarando de interés nacional el abordaje integral e interdisciplinario de las personas que presentan esta patología. Además, la profesional destacó la importancia de la detección temprana, diagnóstico y tratamiento de la enfermedad, su difusión y el acceso a las prestaciones.
Finalmente manifestó que el diagnóstico médico-psicológico del espectro autista, incluye la presencia de perturbaciones graves y generalizadas de habilidades socio-comunicativas y conductas repetitivas que presentan ciertos niños; consecuentemente en el primer nivel de atención, los Equipos de Salud actualizan sus herramientas clínicas para abordarlos.
