“Tucumán está marcando un hito en la salud de la mujer”
Así lo afirmó el presidente de la Federación Internacional de Patología Cervical y Colposcopía (IFCPC), doctor Silvio Tatti, en el marco de las capacitaciones por parte del Instituto de Maternidad “Nuestra Señora de las Mercedes” a profesionales para la implementación de los Nodos Rosas, instituidos para la atención integral de los cánceres ginecológicos. La jefa del Departamento Infanto Juvenil, doctora Elena Hurtado, brindó detalles sobre el avance y finalización de una parte de las formaciones a especialistas. En la ocasión el espacio de prácticas estuvo dedicado a colposcopias y procedimiento de extirpación electroquirúrgica con asa (LEEP), un tipo de tratamiento que previene el cáncer de cuello uterino.
Con esta iniciativa se busca llegar a tiempo para la prevención no solo del cáncer de cuello de útero, sino de mama y de colon: “Esto es algo que se va haciendo de forma progresiva, por eso se brindan las capacitaciones por partes. Posteriormente se realizará una capacitación en mama y otra en la captación del cáncer de colon”, detalló Hurtado, en tanto explicó que en la etapa actual se desarrolla una práctica de LEEP -procedimientos que se hacen en el cuello uterino de las mujeres con lesiones producidas principalmente por VPH-.
Los nodos ayudaran a descomprimir los principales hospitales y permitirán por primera vez en toda la Argentina que el primer nivel de atención tenga la posibilidad de diagnosticar y tratar a mujeres con este tipo de patologías: “Después de finalizada esta serie de capacitaciones lo que buscamos es que solo haya necesidad de acudir a los grandes hospitales por casos de mayor complejidad que no puedan ser resueltos en el primer nivel, como el Centro de Tracto Genital Inferior de Maternidad”, sostuvo la referente, y agradeció el apoyo del Departamento de Capacitaciones de la Dirección de Recursos Humanos en el área de la formación online, así como la articulación con diferentes Caps facilitada por la Dirección de Red de Servicios.
El presidente de la IFCPC, doctor Silvio Tatti, comentó que en mayo de 2019 firmaron en Casa Histórica un acuerdo marco para la prevención del cáncer de cuello de útero, entre la Universidad de Buenos Aires que él representa y el Ministerio de Salud Pública del Gobierno de Tucumán. “A partir de allí y a pesar de la pandemia, se implementaron 18 nodos de prevención de cáncer de cuello de útero, se empezó a comprar equipamiento con tecnología de última generación que no la tienen en casi ningún lugar del país. Colposcopios inteligentes que utilizan la inteligencia artificial (miran el cuello del útero) y equipos de última generación para tratar las lesiones pre-cancerosas en el cuello del útero”.
“El test de VPH es mejor en un 30 por ciento que el Papanicolaou. Esto nos indica si una mujer tiene una infección por VPH y tiene que ser evaluada con una colposcopia, y eventualmente ahí si la imagen del cuello del útero es definible, se puede hacer una biopsia e inmediatamente el tratamiento que previene que esa mujer que tiene la lesión, no progrese a cáncer de cuello de útero”, reflexionó el referente y enfatizó que entre el 80 al 85 por ciento de hombres y mujeres en la Argentina, dos años después de iniciar las relaciones van a contraer VPH de forma asintomática, en tanto después de los 30 años en mujeres entre un 12 y 17 por ciento van a continuar con infección por VPH y estarán en riesgo de desarrollar lesiones cancerosas en una edad promedio entre 40 y 45 años.
La referente del programa de Cáncer de Cuello Uterino, doctora Italia Vega, hizo hincapié en que el programa a su cargo tiene por objetivo principal reducir la incidencia y mortalidad por cáncer de cuello uterino en nuestra provincia: “Hasta ahora contábamos con el test de VPH, con la posibilidad de hacer Papanicolaou en el primer y segundo nivel de atención en la provincia, y ahora esto beneficia mucho en la actividad diaria que tenemos porque contamos con tecnología de avanzada y la posibilidad de hacer tratamiento ambulatorio”, dijo Vega resaltando que Tucumán cuenta con 18 nodos rosas distribuidos en toda la provincia.
En la oportunidad se contó también con la visita de la jefa de sección Patología Cervical de la División Ginecología del Hospital de Clínicas «José de San Martín» de la UBA, doctora Laura Fleider, quien encabezó el entrenamiento a los profesionales para los Nodos Rosas, en colposcopía y escisión con equipo LEEP de radiofrecuencia para el tratamiento de estadios iniciales del cáncer de cuello de útero.
“Me parece que Tucumán es una provincia que está marcando un hito y dedicándole muchísimo a la salud de la mujer y a la capacitación de todos los médicos para poder mejorar la salud femenina. Este personal ya había recibido clases, ahora estamos haciendo preguntas y los veo muy informados e instruidos, con mucho conocimiento de la patología a tratar y sobre todo entusiasmo”, de esta manera lo definió Fleider y destacó que este tipo de entrenamientos son útiles para detectar y tratar las lesiones de HPV y de esta forma prevenir el cáncer de cuello de útero que continua siendo la primer causa de muerte en mujeres de 15 a 44 años en Argentina. |
Testimonio
El médico ginecólogo del hospital de Famaillá, doctor Luis Paredes Chávez, resaltó: “Este tipo de actividades es fundamental para nosotros, ya que podemos ver en directo con personas que tienen mucha práctica y muchos antecedentes a nivel nacional e internacional, cómo se manejan los equipos y eso nos da la práctica necesaria y la confianza para poder hacerlo en nuestro lugar de trabajo”.
“Nosotros arrancamos en el mes de diciembre con el nodo rosa en Famaillá y lo que hemos visto es una captación muchísimo mayor de las pacientes, y de hecho agradecen mucho el servicio, ya que no tienen que trasladarse hasta los centros de mayor complejidad y se puede resolver entre el 80 y el 90 por ciento de las patologías cervicales en el servicio”, agregó.
“Ahora contamos con un aparato nuevo que se llama EVACOLPO, que tiene la posibilidad de tomar fotografías y chequearlas y compararlas con otras fotografías para ver si corresponden a unas lesiones de bajo o alto grado, y poder guiarnos con respecto al diagnóstico y tratamiento”, concluyó.