“Esta es una gran fiesta para todos los tucumanos”
Así lo manifestó la ministra de Salud Pública, doctora Rossana Chahla, quien junto al vicegobernador a cargo del Poder Ejecutivo, contador Osvaldo Jaldo, participó del acto protocolar en homenaje a la Virgen de la Merced en plaza Belgrano.
La titular de la cartera sanitaria aseguró que el evento fue una fiesta muy importante para los tucumanos. “Como todos los años, estamos agradeciendo a la Virgen por todo lo que nos ha dado y venimos a recibir sus bendiciones. Es una fiesta para nosotros porque es la Virgen que nos permitió la libertad a todos los argentinos”, expresó.
Luego del acto hubo una procesión hasta la Iglesia Catedral, donde se celebró la Santa Misa. “Ahora debemos seguir rezando y trabajando. Para mí es un honor participar de estos eventos religiosos y lo disfruto mucho”, agregó la ministra.
La especial creencia que tiene los tucumanos hacia la Virgen de las Mercedes se inicia desde los orígenes de Ibatín, fundada por Diego de Villa Roel en 1565. Durante 120 años los españoles llegados a estas tierras depositaron su fe en la sagrada imagen traída desde Cusco, Perú, por los frailes, lo que marcó el rumbo de la religiosidad y de la conquista espiritual de la población originaria y mestiza. Incluso su imagen acompañó el peregrinaje del pueblo cuando debió abandonar la ciudad de Ibatín acechada por sequías, inundaciones y pestes.
Por los muchos favores que la Virgen de las Mercedes dispensó a los tucumanos, en 1867 el Cabildo la nombró Patrona y Abogada de San Miguel de Tucumán. Pero la fe en su imagen, cuyo sentido teológico “es la perfecta libertad y la liberación de la humanidad y del Cosmos”, iba a tomar gran relevancia a partir de la Batalla de Tucumán, un 24 de septiembre de 1812, coincidentemente el día en que el mundo le demuestra su devoción.