Florencia, una paciente terminal, logró casarse con su gran amor, José, en el hospital de Concepción
La ceremonia se llevó a cabo en el efector gracias a la ayuda de los médicos y enfermeros del servicio, que pusieron todo su empeño en hacer vivir a Florencia un día único.
Al respecto, el enfermero del servicio de oncología del hospital Regional de Concepción, Héctor Antonio Medina, contó que ellos tienen internados pacientes en la etapa terminal de su enfermedad y una paciente de 26 años con cáncer le manifestó que quería casarse, pero que habían perdido el turno que tenían, y la plata para pagarle al juez la habían gastado por su enfermedad y por los traslados, ya que ellos son de Alberdi.
“Yo le dije que íbamos a ver la posibilidad de casarlos en el hospital, ya que anteriormente lo hicimos dos veces, con pacientes que nos manifestaron este tipo de cosas, que querían poner en orden su vida y casarse por el amor que le tienen a su pareja y a su familia. En ese momento lo hablé con mi jefe, el doctor Hugo Requejo, y la doctora Laura Raviolo, que también es médica oncóloga, y con ellos empezamos a hacer los trámites buscando gente conocida que nos ayudara. Por suerte pudimos facilitar un poco las cosas y conseguimos el juez y el sacerdote”, explicó.
Finalmente, el lunes se realizó una ceremonia muy emotiva, con una mezcla de alegría, tristeza y dolor, ya que la paciente Florencia y José, muy emocionados, lloraron durante todo el cortejo. De la boda participó todo el personal de salud del efector, los familiares directos y amigos de la pareja.
Siguiendo esta línea, el profesional contó que Florencia se encuentra realizando su etapa final de quimioterapia, es por eso que está internada en el efector ya que se descompensa bastante. La joven está en proceso de recuperación para poder volver al proceso de quimioterapia y pueda regresar a su casa unos días.
“En todos los hospitales existe esta parte humana que tenemos todos nosotros, los enfermeros, los médicos, el personal del hospital, para darle una mano al paciente, acompañarlo, contenerlo y estar a su disposición; eso marca la diferencia”, finalizó.
