“Hablar con responsabilidad social de la conducta suicida ayuda a prevenirla”

Fueron palabras de la Licenciada Irma Thomas. Derribar barreras de accesibilidad a los servicios de salud mental, desmitificar y visibilizar de manera respetuosa esta problemática es una tarea que el Sistema Provincial de Salud viene realizando hace ya 6 años.

Las licenciadas Irma Thomas y Daniela Vitolo a cargo del Programa Provincial de Prevención de la Conducta Suicida dependiente del PRIS, comentaron las principales características del trabajo local que se desarrolla respecto a la temática y en el marco de  las normativas que establece la Ley Nacional de Salud Mental N° 26.657.

El programa se creó a través de una resolución emitida en el año 2009 con el objetivo de brindar una atención que priorizara la problemática de la conducta suicida. En una primera etapa se brindaron capacitaciones a los equipos de salud con la consecuente creación de los servicios de Salud Mental en hospitales polivalentes como el Padilla, que cuenta con sala de internación y guardia de 24 horas los 7 días de la semana, además de consultorios externos.

Con esta iniciativa se buscó generar mayor acercamiento, sensibilización y accesibilidad para la población y la especialización en el tema de los profesionales en salud mental, a través de la difusión de un protocolo en el que se acuerda cuáles son los pasos a seguir en el abordaje de la problemática.

“A partir de ahí iniciamos capacitaciones abiertas a los equipos de salud en general, donde intervienen psicólogos, enfermeros, médicos clínicos y generalistas, pediatras y directores de centros de atención primaria de la salud y de Áreas Programáticas y Operativas del SIPROSA”, detalló Thomas. Además comentó que la conducta suicida comenzó a visibilizarse como problemática pública en el año 2014, cuando la Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió un documento en el que la definió como un imperativo global.

En ese sentido, la referente explicó que “no se trata de una problemática que deba ser desestimada ni estigmatizada, en la medida que desde salud estemos preparados para visibilizarla ante la sociedad y dar respuestas, podremos disminuir sus efectos en nuestra población, desmitificarla para que deje de ser tratada a puertas cerradas, solo en lo privado y lo familiar”.

Por su parte, Vitolo enfatizó que con el equipo local se iniciaron los primeros registros a nivel epidemiológico, únicos en el país. “Es fundamental porque a partir de ellos se puede generar un índice provincial para saber cómo se encuentra Tucumán en relación con el resto de las provincias del país”, explicó.

“Esta problemática es multifactorial, muy compleja, no hay un solo motivo que la origine. Los vínculos a nivel familiar son primordiales pero también se encuentra ligada al consumo de sustancias, factores económicos, culturales, educativos y sociales de diversa índole” manifestó Vitolo.

Al respecto, ambas profesionales destacaron que cuando los padres de chicos jóvenes perciban en ellos un cambio brusco de conducta (hábitos de sueño, alimentación, de carácter, repentino abandono de actividades comunes, autoflagelación), lo más importante es recurrir a un profesional de la salud y realizar la consulta a tiempo.

Un rol determinante juegan en este sentido los medios de comunicación. “Durante el año 2011 realizamos junto al Departamento de Comunicación del Ministerio las primeras jornadas de capacitación sobre el debido tratamiento de la temática para medios escritos y orales”, comentó Thomas.

Dichas capacitaciones continuaron en base a las normativas que la OMS y el Ministerio de Salud de la Nación establecen, instando a que este tipo de noticias no ocupen, por ejemplo, las tapas de los periódicos, no se publique el método empleado, la historia clínica, familiar ni diagnóstico del paciente además evitar la publicación de fotos sensacionalistas que incluso puedan dar origen a imitaciones. “Hablar con responsabilidad social de la conducta suicida ayuda a prevenirla”, afirmó Thomas.

Cabe destacar que ante señales de alarma, además del Hospital Padilla, los hospitales Obarrio, Nuestra Señora del Carmen, del Niño Jesús, Eva Perón y hospitales y CAPS del interior cuentan con asistencia psicológica y psiquiátrica. Así también se recalcó la labor conjunta que se desarrolla junto al Programa de Trastornos Mentales Severos de la provincia.