Hoy se celebra la creación del Registro Nacional de Donantes de Médula Ósea
El registro da respuesta a personas que necesitan un trasplante y no tienen un donante compatible en su grupo familiar.
Cada año, cientos de personas son diagnosticadas con enfermedades hematológicas como leucemia, anemia aplástica, linfoma, mieloma, errores metabólicos o déficits inmunológicos. Estas patologías pueden ser tratadas con un trasplante de CPH, conocido popularmente como trasplante de médula ósea.
Sin embargo, sólo entre un 25% y un 30% de estos pacientes tiene la posibilidad de encontrar un donante compatible en su grupo familiar. El resto debe recurrir a un donante no emparentado, a través de los registros de donantes voluntarios, entre ellos el Registro Argentino, que constituyen la Red Mundial Bone Marrow Donors Worldwide.
Es por ello, la importancia de la creación hace 15 años, del Registro Nacional de Donantes de Células Progenitoras Hematopoyéticas del INCUCAI.
Cómo inscribirse
Para ser donante se requiere estar sano, tener entre 18 y 55 años y pesar más de 50 kilos. Hay que dirigirse al Centro de Donantes más cercano y donar una unidad de sangre. Un técnico informará a los donantes sobre el tema para completar su ficha de inscripción.
Así, con el consentimiento informado del donante se toma una pequeña muestra de la unidad de sangre donada para realizar el análisis de su código genético (HLA), cuyos datos se ingresan a la base informatizada del registro. Las CPH sólo se donan si hay alguien que lo necesite y que sea un 100% compatible con el código genético del donante.
Cabe destacar que el donante por aféresis, puede restablecer su vida normal en el mismo día del procedimiento, que tarda aproximadamente entre dos y tres horas. Para esto es necesaria una preparación anterior que consiste en una alimentación especial y la toma de unas vitaminas que sirven para que las células progenitoras de la sangre proliferen y salgan a la sangre periférica.