Incrementaron las virosis no COVID en Tucumán

Así lo confirmó el responsable de la División de Salud Respiratoria, doctor Ernesto Weiss. Y advirtió sobre la importancia de la vacunación y diagnóstico temprano para cortar la cadena de contagios.

“Este año aparecieron e incrementaron las virosis no COVID, y dentro de ellas la reaparición del Virus Sincitial Respiratorio (VRS) y la persistencia del Rinovirus, ha provocado el desencadenamiento de enfermedades virales”, comenzó diciendo el referente.

Sin embargo, aclaró que desde hace dos años no hay un aumento del virus del Influenza, que es el que produce la gripe.

“Estos virus que reaparecieron son capaces de desencadenar distintos tipos de patologías respiratorias que van desde resfríos, crisis agudas en pacientes crónicos respiratorios y en pediatría fundamentalmente, la bronquiolitis. También se notó un incremento leve de las neumonías en este último periodo. Esa es la situación  epidemiológica”, detalló.

Por lo tanto, las recomendaciones por parte del profesional son:

–           Con respecto a los niños: aislamiento de los bebés, no dejar de dar el pecho, tener todas las vacunas al día, no hacer visitas innecesarias, lavado frecuente de manos

–           Aprovechando las medidas generales de cuarentena que se fueron abandonando poco a poco, para los adultos y pacientes de riesgo: aquellos que ya tienen la vacuna de COVID y después de 15 días de la última dosis, se coloquen la vacuna del Influenza (gripe) junto a la de la neumonía. Sobre todo en niños de seis meses, pacientes de riesgo, embarazadas, pacientes con comorbilidad. Para la bronquiolitis no hay vacunas pero sí medidas de bioseguridad que se parecen a las del COVID.

En los adultos, los síntomas generales son: resfrío, tos, fiebre, agitación. En personas de riesgo como el adulto mayor, embarazadas o pacientes con comorbilidades, es importante la consulta precoz y el aislamiento. Y en los niños cuando presenten estos signos, no concurrir a la escuela y aislar al niño menor, aconseja el especialista.

“La contagiosidad del virus depende de que cuando hace frío nos encerramos y se incrementa a partir de la cercanía, el hacinamiento, la falta de ventilación de las habitaciones. Hay que romper la cadena de contagio”, explica.

Y concluye: “En el momento de la consulta se hace el diagnóstico diferencial, sobre todo teniendo en cuenta los contactos. No todos los pacientes que tienen esta sintomatología tienen COVID, pueden ser enfermedades desencadenadas por los virus estacionales”.