Insomnio: Cómo combatir la problemática
La neuróloga a cargo de la unidad de Epilepsia y Trastornos del Sueño del hospital Avellaneda, doctora Daniela Graci, habló sobre la dificultad para conciliar el sueño o para permanecer dormido durante la noche que es multicausal y puede afectar a un amplio rango etario.
Al respecto comentó que la problemática puede ser episódica y aparecer de forma aislada o puede ser más duradera y en ese caso afecta notablemente la calidad de vida del paciente cuando el trastorno se cronifica. “Es importante entender que no todo es insomnio, hay una cantidad normal de horas que cada persona debe dormir y esto varía de acuerdo a la edad. Muchas veces en la tercera edad se consulta por insomnio y en la mayoría de los casos hay que tener en cuenta que la persona va a la cama mucho más temprano y por eso despierta tan temprano, sumado a que durante las horas de actividad las mismas no suelen ser tan intensas ni de desgaste”, dijo.
En este sentido Graci aclaró que todas las horas del día que dormimos se van sumando a la cantidad de horas diarias de sueño: “Si yo duermo siesta son horas de sueño que le estoy quitando a la noche, por eso es importante regular esto y tener un buen registro, en consultorio implementé un diario de sueño, que es una planilla pre-armada que se entrega al paciente para que registre todo lo que hace durante el día, si toma alguna medicación, a qué hora se va a la cama, a qué hora despierta y en base a eso analizamos qué está mal en las prácticas y qué se puede mejorar para dormir durante la noche”.
La falta de actividad física y el estrés repercuten notablemente sobre la falta de sueño o insomnio, puntualizó la especialista y mencionó como ejemplo aquellos trabajos que implican permanecer sentado 8 horas frente a una computadora o mostrador, sin poder realizar movimientos físicos y con la carga mental que esto implica.
“Si la persona es sana y el problema es un insomnio -sea crónico o episódico- hacemos bastante hincapié en las medidas higiénicas del sueño, en que mantenga un diario del sueño y pueda acomodar los horarios en los que duerme en general, de la gimnasia en particular, del consumo de café o mate, entre otras cosas. La higiene del sueño implica mejorar todo lo que se pueda para llegar mejor al momento, como apagar las pantallas al menos una hora antes de ir a la cama, usar ropa específica para ir a dormir -como pijamas-, todo eso es el primer paso. Posterior a eso se le puede ofrecer ayuda farmacológica al paciente, pero se aclara que no son tratamientos para toda la vida, sino para superar el problema y luego recuperar el sueño fisiológico”, detalló.
Siguiendo esta línea Graci sostuvo que es tan importante el momento del sueño como de la vigilia en la salud integral de la persona, durante el sueño está comprobado científicamente que se liberan hormonas de crecimiento y desarrollo, se activan funciones cerebrales para potenciar la memoria y las actividades ejecutivas, entre otras múltiples funciones: “Si el sueño se altera y no es de calidad, todo esto empieza a fallar y luego las hormonas empiezan a repercutir en lo físico con aumento de peso, nutrientes no asimilados, entre otras consecuencias”.