«La Donación alimenta la esperanza”
Laura Vaccarone es la mamá de Rafaela, una nena de 6 años que padece una extraña patología inmunológica de la que se conocen solo 5 casos en todo el mundo. Si bien se somete a un tratamiento que mantiene estable su salud, la única cura que hoy se conoce para su enfermedad, es un trasplante de médula ósea.
En el marco del lanzamiento de una capacitación destinada al recurso humano de la Maternidad del Hospital Eva Perón, que se realizó con el objetivo de poner en marcha en Tucumán donaciones de sangre de cordón umbilical, conocimos a Laura Vaccarone, mamá de Rafaela, una niña de 6 años por la que hace más de dos años emprendió una lucha incansable.
“Hace más de dos años y medio diagnosticaron a mi hija con una rara patología inmunológica de la que solo se conocen 5 casos en el mundo, y desde entonces estamos en esta búsqueda, en esta lucha”. Lo que Laura y Rafaela necesitan es el gesto solidario y desinteresado de un donante, lo cual puede lograrse a través de la decisión de una persona adulta que se inscriba como donante de médula ósea. Con solo una unidad de sangre que se analiza, para que luego tenga lugar la donación propiamente dicha.
Pero hay otra forma muy maravillosa y hasta más simple, que se realiza con las células que se extraen de la sangre del cordón umbilical de un bebé, esas son células madre, con el potencial de convertirse en muchos tipos distintos de células en el organismo y que funcionan como un sistema reparador del cuerpo.
“Yo quiero contar la historia de Rafaela, para que conozcan un caso concreto, de una niña que recién ahora puede hacer un poco de vida normal pero con muchos cuidados por los peligros que ella corre en su vida y en su salud”, contó emocionada Laura, al tiempo que manifestó la importancia que revisten las capacitaciones para que se habilite a Tucumán como provincia donante de células de sangre de cordón umbilical.
Para finalizar, Laura expresó que “es fundamental para mi pedirle a las mamás y papás que deciden sobre ser donantes cuando van a tener sus bebés, que tengan en cuenta que hay otros hijos como la mía, que también necesitan de la vida como sus hijos y que a partir de mañana pueden sumar una esperanza a mí y a mi familia, para que Rafaela también pueda hacer una vida normal y sana”.