La escuela de pacientes cierra el año con un emotivo acto
En la mañana de hoy, profesionales y alumnos pertenecientes a la escuela de pacientes del efector, cerraron el año con un acto y entrega de distinciones, además de la puesta en escena de una obra de teatro y el testimonio de sus protagonistas.
Al respecto la doctora Marcela Collante, neumonóloga de la Escuela de Pacientes, contó: “Hoy estamos cerrando un año más de nuestra adorada Escuela de Pacientes, que congrega muchísimas aulas, como ustedes saben, aula de reumatología, diabetes Infantil, diabetes del adulto mayor, Cesación Tabáquica y EPOC, aula de Alergia, y educación física adaptada. Recordemos que esto fue creciendo año a año, gracias a una iniciativa del ministro de salud, doctor Medina Ruiz, cuando él era director de este hospital, y que fue creciendo día a día. Es un espacio de ayuda mutua, es un espacio donde hay buena onda, es un espacio donde los pacientes se encuentran felices, se olvidan de sus enfermedades y, por sobre todas las cosas, aprenden. Aquí aprenden el uno del otro, por ejemplo: el niñito que es insulino dependiente, que ya se coloca la insulina, le enseña al otro pequeño que ingresa al aula a colocarse la insulina. Aquí es muy importante la ayuda del otro, el aprender del otro y el trabajar en conjunto, y sobre todo con un equipo de profesionales maravillosos, porque tenemos un equipo interdisciplinario de trabajo increíble con nutricionistas, terapistas ocupacionales, y hasta una profesora de teatro, porque también la expresión corporal es muy importante y de gran ayuda. Y hoy, estamos cerrando el año con un acto muy emotivo donde los alumnos presentaron obras de teatro, como el caso del aula de cesación tabáquica con su obra: Un gran round, entre otras bellas muestras. Y a su vez también tuvimos testimonios de los pacientes que dejaron de fumar, de los pacientes que pasaron por el aula y que realizaron actividades en la escuela. Así que fue cierre de un año con muchas experiencias, cosas buenas, cosas malas, tristezas, y alegrías, pero con la mirada puesta en el 2025 y con muchas ganas de seguir trabajando”.
TESTIMONIOS:
“Es como que encontré mi lugarcito en el mundo”
Natalia Gómez, paciente del aula de reumatología: “Este año fue grandioso para nosotros, porque aunque si bien ya venimos desde hace años atrás, informándonos constantemente sobre la enfermedad, este año fue algo diferente. Venir acá además es divertirnos, pasarla bien, y olvidarnos de todo. Personalmente, es como que encontré mi lugarcito en el mundo, porque la verdad que es una enfermedad muy difícil de sobrellevar, pero cuando uno está contenido aquí es diferente. Y es apoyarnos cuando uno está mal, cuando uno necesita. La verdad que se hizo un grupo tan hermoso, que puedo decir que tengo amigos en este lugar. Disfruto un montón de venir, porque hasta hicimos una obra de teatro, actividad física y un taller de canto, así que la verdad yo no dejaría. Y ojalá que esto le sirva a mucha gente, porque cuando yo me enteré de mi enfermedad, todo mi mundo se vino abajo, y aquí, con el apoyo de todos los doctores y de nuestros compañeros, empiezas a ver las cosas de otra manera”.
“En la escuela son muy unidos porque se entienden entre ellos y pueden hablar de todo los que les pasa”
Malvina Sánchez, perteneciente al aula de pacientes de diabetes : “Ya pasaron 3 años desde el momento que le diagnosticaron diabetes tipo 1, a mi hija Martina de 9 años, por lo que empezamos a venir a la escuela de pacientes, y realmente fue una experiencia bastante bonita porque los chicos están con sus pares, y aprenden más. El equipo de profesionales que nos tocó desde el momento que uno ingresa, desde el guardia, como te reciben las secretarias, enfermeros y los médicos, como la doctora Belén Torossi, la licenciada Verónica Menín, y la licenciada Mariana, hacen realmente un equipo espectacular por lo que logran con los chicos, desde sacar la timidez y el miedo del diagnóstico. Aquí en la escuela son muy unidos porque se entienden entre ellos y pueden hablar de todo los que les pasa y de cómo se sienten. También aprenden muchísimo sobre salud con todos los doctores, desde la forma de alimentarse, aprendiendo a prepararse sus propios alimentos y armar un recetario, hasta como enfrentar su día a día, guiados con mucho amor y dedicación de cada uno de los profesionales de este maravilloso hospital, así que solo tengo palabras de agradecimiento con el deseo y la expectativa que el año próximo podamos continuar viniendo”.