La importancia de cuidar la vista
Es muy importante proteger los ojos de factores externos como radiaciones solares así como cuidar nuestra alimentación. Hay cientos de enfermedades oculares. Algunas de ellas son leves y transitorias y producen síntomas molestos pero no pérdida de visión. Otras acaban causando una ceguera total e irreversible.
Ningún sector de la población escapa a estas enfermedades, que pueden afectar a niños pequeños y ancianos, a personas de países de ingresos medios, medianos y altos, y a hombres y mujeres.
En este sentido, la doctora Silvia Angélica Rodríguez, miembro del servicio de Oftalmología del hospital Padilla, explicó que una de las patologías más comunes en esta época del año es la conjuntivitis que puede causar hinchazón, picazón, ardor, lagrimeo y enrojecimiento de la conjuntiva, la membrana delgada y translúcida que recubre la parte blanca del ojo y el interior de los párpados. Las causas pueden ser:
- Infección bacteriana o viral
- Alergias
- Sustancias que causan irritación
- Productos que se usan para los lentes de contacto, gotas para los ojos o ungüentos
“La conjuntivitis, en general, no afecta la vista. La conjuntivitis infecciosa se contagia fácilmente de persona a persona. La infección desaparece por sí sola sin tratamiento, pero la conjuntivitis bacteriana necesita tratamiento con gotas o ungüentos antibióticos”.
Otra de las recomendaciones que hizo la profesional fue llevar gafas de sol. Las radiaciones solares pueden ser muy dañinas para los ojos, por lo que debemos protegerlos con unas gafas de sol homologadas que cuenten con filtro para los rayos ultravioleta. Te protegerá también de otros agentes ambientales agresivos para los ojos como el viento o el humo.
Por último, Rodríguez resaltó la importancia de no usar lentes de contacto en caso de ir a la pileta, río o hacer alguna actividad acuática. “El mal uso puede causar orificios y provocar infecciones por lo que no es recomendable que se usen si van a estar en el agua”. Además indicó que se debe cuidar la higiene de los mismos, guardándolos en un estuche limpio y libre de bacterias, y seguir al pie de la letra las instrucciones de limpieza diaria.