La salud, el rostro humano del cambio climático
Así lo expuso el doctor Carlos Ferreyra, presidente de la Alianza Clima, Vida y Salud, en el IV Foro Internacional Climactivo, quien remarcó al tiempo el impacto regional del encuentro que servirá como base para la próxima Conferencia de las Partes (COP) de Naciones Unidas que se desarrollará en Chile, y al que fue invitada la ministra de Salud Pública, doctora Rossana Chahla, y su equipo.
Ferreyra es médico cirujano con diplomatura en Epidemiología Avanzada, Salud Pública y Salud Internacional, y expuso en la mesa ‘Periodistas de Ciencia’ junto a Maria Gabriela Vinzental, también de Buenos Aires, y Michelle Soto Méndez, de Costa Rica.
La alianza que integra es una entidad que trabaja en varias regiones del mundo incluyendo Argentina, Chile, México, Colombia y España, en un tema que Ferreyra calificó como gravísimo: el cambio climático.
“Lo que nos dice la ciencia es muy relevante para preservar un planeta sustentable, garantizando el hábitat que nosotros hemos tenido para futuras generaciones. La política a nivel nacional no ha tratado esto en el marco del contexto global que debería ser, según el Acuerdo de París donde se comprometió a reducir las emisiones de gas invernadero cambiando los modelos energéticos hacia 2050, esto no se está logrando”, dijo. Pero marcó una diferencia entre las políticas nacionales y las que llevan adelante cada provincia e incluso gobiernos municipales, resaltando en este sentido el trabajo que realizó Tucumán en la organización, por cuarto año, de un encuentro internacional con un fuerte impacto regional, y que servirá como base de la próxima asamblea de la ONU sobre cambio climático que se llevará a cabo en Chile.
Los trabajos expuestos en Climactivo evidencian un despertar de conciencia de la ciudadanía tucumana. Es fundamental trasladar esto a marcos normativos para que la provincia pueda contar con una ley de cambio climático, según remarcó Ferreyra, a partir de la cual se pueda plantear una estructura armoniosa para que el Gobierno demuestre a los tucumanos la importancia de esta temática. “Esto incluso puede asegurar inversiones, porque en el Acuerdo de París se aprobó poner a disposición del mundo en desarrollo 100 mil millones de dólares anuales desde el 2020, para cumplir con el objetivo y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero”, añadió.
La salud es el rostro humano del cambio climático, enfatiza Ferreyra, señalando situaciones y escenarios que debemos tener en cuenta, como el impacto sanitario que tienen las alteraciones climáticas como por ejemplo las olas de calor que afectan principalmente a zonas urbanas, y que provocan complicaciones a niños, adultos mayores y a personas con patologías crónicas.
Las enfermedades emergentes, los problemas de la frontera vectorial que avanzar hacia el sur a medida que la atmósfera se va calentando cada vez más, esto se ve en la proliferación de mosquitos, ratas, vinchucas que irán avanzando hacia nuestro territorio y con ellos dengue, zika, chikungunya y fiebre amarilla. “Tenemos que pensar que esto va a suceder”, advirtió Ferreyra, instando a tomar conciencia de un complejo sistema de impactos que debe entenderse, en primera instancia, para poder atender la problemática.