Los médicos centinelas continúan trabajando arduamente en el control de fronteras
A raíz del caso positivo de siete jóvenes que volvían de su viaje de egresados de Córdoba, el personal de salud apostado en la terminal de ómnibus de San Miguel de Tucumán, desplegó durante la madrugada un operativo para diagnosticar y aislar a los afectados.
Las vacaciones a zonas turísticas de Tucumán, la Costa Argentina, los viajes de egresados y la llegada de los trabajadores golondrinas; es el desafío al cual se enfrenta diariamente el equipo de médicos centinelas en la Terminal de Ómnibus, el Aeropuerto Benjamín Matienzo y los puestos fronterizos.
Los estudiantes que viajan de egresados salen de la provincia con un PCR negativo de menos de 72 horas y al volver, se les hace un test de anosmia y clínica.
“Anoche hemos determinado que había chicos con síntomas. En un primer momento se hisopó a ocho de ellos, luego se hisoparon más, y allí determinamos la presencia de siete personas positivas COVID-19. En total viajaban 36 chicos de turismo y dos coordinadores”, sostiene la coordinadora de la Terminal de Ómnibus de Médicos Centinelas y responsable del control sanitario de fronteras terrestres, doctora María Liz Albano. A tiempo que llama a la población a tomar conciencia, especialmente a los padres por este tipo de excursiones.
“Invitamos a los adultos a que remarquen a los chicos las actitudes y normativas que tienen que seguir en este tipo de viajes que sabemos que a veces hay mucho descontrol y las consecuencias están a la vista. Epidemiológicamente se está complicando la situación, están aumentando los casos. Como responsabilidad social que tenemos todos hay que seguir los protocolos, intensificar los controles y sensibilizar a los egresados en que deben ser más prudentes en su accionar para evitar que esto siga creciendo. Si no somos responsables como sociedad, no vamos a poder frenar nunca esto”, advierte la referente.
Por otro lado, cuenta que a los turistas que llegan a la terminal se les hace un control de anosmia, temperatura, un chequeo clínico. En caso de determinar alguna anosmia positiva o hipertermia, inmediatamente el paciente es hisopado.
A su vez, de los pasajeros que bajan del micro, se selecciona entre un 10 y 20 por ciento al cual se le realiza un testeo, un hisopado nasofaríngeo. Especialmente son elegidos aquellos que vienen de zonas de precedencia más álgida como la costa argentina o zonas turísticas.
En este sentido, añade que actualmente están recibiendo muchos trabajadores golondrinas que provienen de Mendoza y Río Negro. A ellos también se les realiza el mismo procedimiento; al igual que viajeros locales de Tafí del Valle, El Mollar o Amaicha.
“Por día tenemos un promedio de 1000 pasajeros durante la semana, y ese número se incrementa a 1500-1600 los fines de semana. Cuando hay situaciones especiales como pasó para el fin de semana largo de Carnaval, se incrementa casi a 2000 pasajeros por día. En el puesto de la terminal estamos trabajando 40 personas, las 24 horas. En el aeropuerto tenemos un poco menos de pasajeros, aproximadamente 400 por día”, cierra la médica.