Los Murciélagos son aliados del ecosistema que exigen precaución

El inicio de la temporada de calor propicia una mayor actividad de los murciélagos, por ello la División de Zoonosis del PRIS, a través de la bióloga Evelyn Cortés, emitió una serie de recomendaciones para la población sobre cómo actuar ante la presencia de estos animales y desmitificar los riesgos que conllevan.
La referente del Programa Animales Ponzoñosos, Evelyn Cortés, bióloga y referente de la División Zoonosis de PRIS, contó: “La principal preocupación es la rabia, una enfermedad que, aunque es poco frecuente, puede ser transmitida por murciélagos a través de mordeduras o el contacto directo con su saliva. La principal recomendación es no tocar a los murciélagos, en el caso de encontrar un ejemplar, que esté visible durante el día o en un lugar inusual, se debe sospechar de rabia”.
Siguiendo esta línea, la profesional detalló que, para manipular de forma segura un murciélago, se recomienda usar guantes gruesos o un objeto para colocarlo en un frasco con tapa y llevarlo a la División de Zoonosis, ubicada en avenida Mate de Luna 1935, esta precaución es crucial, ya que los murciélagos no suelen ser agresivos y atacan solo si se sienten amenazados.
Cortés enfatizó la importancia de proteger a estas especies debido a sus múltiples beneficios para el ecosistema y la salud humana. Los murciélagos cumplen roles clave, como la regeneración de ambientes naturales. No son animales agresivos, pero pueden transmitir rabia a través del contacto directo con su saliva en una herida abierta o por una mordedura.
“Los frugívoros (se alimentan de frutas) dispersan semillas, contribuyendo a la reforestación; a la polinización ya que algunas especies polinizan plantas de importancia comercial, como así también aportan al control de plagas debido a que consumen toneladas de insectos perjudiciales para los cultivos y la salud humana, reduciendo la necesidad de pesticidas; por otro lado, ayudan a controlar las poblaciones de insectos que transmiten enfermedades, como los mosquitos.
“En Tucumán, existen 34 especies de murciélagos, 18 de las cuales se han adaptado a las construcciones urbanas de la capital. A partir de septiembre, con el aumento de las temperaturas, su actividad se incrementa. Durante la noche, salen a alimentarse y regresan a sus refugios antes del amanecer. Los murciélagos pueden formar colonias en construcciones humanas, lo que a veces genera molestias por ruidos y olores. Sin embargo, no se deben usar venenos para eliminarlos o ahuyentarlos. Para la exclusión de murciélagos, se recomienda consultar a expertos o seguir los protocolos del Programa de Conservación de Murciélagos de Argentina (PCMA)”, detalló.
Finalmente, la profesional destacó que la prevención es la mejor herramienta. “No se debe manipular a los murciélagos con las manos desnudas y, si se encuentra uno en condiciones inusuales, se debe llevarlo a las autoridades sanitarias para su análisis. La convivencia segura con estos animales es posible si se respetan las precauciones necesarias”, cerró.
La dirección de Zoonosis, trabaja bajo los lineamientos del Ministerio de Salud, a cargo del doctor Luis Medina Ruiz, con el objetivo de priorizar las necesidades de la población.