Más de 4 mil personas fueron operadas de forma ambulatoria en el Avellaneda
Desde el 2010, el efector brinda a sus pacientes la posibilidad de operarse y ser dados de alta el mismo día.
El Departamento Quirúrgico del Hospital Nicolás Avellaneda realiza en promedio 1500 cirugías al año, de las cuales 700 corresponden a cirugías generales. Sin embargo, actualmente el 74 por ciento de todas las operaciones del servicio, se practica de forma ambulatoria. Las cirugías mayores ambulatorias, conocidas también como cirugías de día o sin ingreso, permiten al paciente que la noche anterior y posterior a la intervención quirúrgica, las pase en su hogar.
“Nuestro departamento reúne a todas las especialidades que tienen una actividad quirúrgica, es decir que hacen cirugías en el efector. Para realizar esta actividad contamos con un centro quirúrgico formado por tres quirófanos totalmente equipados y un cuarto para cirugías de menor envergadura. Todas las intervenciones que practicamos en las distintas especialidades se realizan con la dinámica de cirugías mini invasivas; ésta es una característica de nuestro establecimiento”, dice al respecto el jefe del Departamento Quirúrgico, doctor Enrique Toll. Y añade que para cirugía general el staff está conformado por diez médicos, en urología por cuatro, en ginecología hay seis, para cabeza y cuello dos y en traumatología tres.
El inicio de la Unidad de Cirugía Mayor Ambulatoria comenzó en septiembre del 2010 con un menú prestacional que incorporaba la Colecistectomía Laparoscópica, la patología de pared, hernias y eventraciones pequeñas por vía convencional, pero luego el menú prestacional se fue ampliando y se incorporaron las cirugías de las varices y se abrió un consultorio de proctología.
“En agosto de este año se presentó el servicio a la Universidad Católica de Buenos Aires para evaluar su desarrollo y resultado en estos años. Hasta el momento llevamos realizadas 4.067 operaciones de día. El paciente llega a las 7 de la mañana, ingresa con todos los estudios y luego de ser intervenido quirúrgicamente pasa a una Unidad de Recuperación Post-anestésica, a una zona de adaptación al medio, donde ya puede estar en contacto con sus familiares. Aproximadamente, entre las 17 y 18 horas ya se encuentra en su domicilio”, comenta el doctor Federico Brahim, médico de planta del Servicio de Cirugía del hospital.
Por su parte, la doctora Paola Alejandra Martín, médica recuperadora de la Unidad de Recuperación Post-anestesia explica que el servicio se divide en dos etapas: la recuperación propiamente dicha, y la re-adaptación del paciente al medio, que quiere decir que la persona vuelva a recuperar todos los signos vitales y todas sus funciones anteriores a la cirugía. “Para ello se los prepara en el ámbito de lo que es la recuperación: se los contacta con su familia, se controla sus parámetros vitales, tolerancia de dieta y posteriormente, si el paciente está en condiciones de ser externado continúa el posoperatorio en su domicilio”, manifiesta la especialista.
Cabe destacar que esta modalidad de intervención, reduce en grandes cantidades los costos hospitalarios del paciente que antes debía permanecer internado muchísimo tiempo dentro del hospital. Y, tal como subraya la doctora Martín permite una gran afluencia de pacientes a quienes se les puede brindar una respuesta favorable con operaciones de día.
Actualmente, la unidad cuenta con cinco camas disponibles para los pacientes que ingresan de quirófano en el post-operatorio inmediato, también posee un área de rehabilitación al medio que cuenta con sillones adaptables.