Nuevamente la música trajo alegría a los pacientes del Centro de Salud
Con el objeto de brindar un trato diferencial y humanizado, el músico Antoine Nicolau expuso todo su talento como pianista ante los pacientes internados en la Unidad Coronaria y Cuidados Intermedios del hospital Centro de Salud.
No es la primera vez que este efector recibe a jóvenes músicos tucumanos que se acercan de manera desinteresada, con el fin de brindar un grato momento musical que ayude a la pronta recuperación de aquellos pacientes que más lo necesitan.
“El objetivo primordial de la Humanización en salud es lograr que se vuelva a generar el encuentro con el otro, y para lograrlo tratamos de utilizar todos los recursos disponibles, como en este caso, por ejemplo, la música”, dijo la jefa de la Unidad de Humanización de la institución, licenciada Alejandra Acosta, quien agregó que la música activa un área del cerebro que beneficia a la estimulación del paciente.
Por su parte, el pianista y compositor Antoine Nicolau expresó que esta acción solidaria y desinteresada de su parte tiene la intención de retribuirle a la sociedad la posibilidad de haber podido formarse como músico en un establecimiento público. “Elegí este hospital para proponer mi música por una cuestión de cercanía, porque vivo en frente. En mi infancia venia aquí a jugar a la pelota con mis primos. Además conozco el gran trabajo y las múltiples tareas que aquí realizan los médicos”, expresó.
Los paciente de las salas de Unidad Coronaria y Terapia Intermedia fueron los privilegiados oyentes de algunas de las obras de Bach, entre otra variada selección de temas, con la intención de favorecer la estadía de los que se encuentran en estas área de cuidados especiales.
“Toda internación es un trauma y más cuando un paciente se encuentra en terapia intensiva. Personas que de pronto están alejadas de sus familias y con muchos aparatos a su alrededor; por lo que lleva consigo mucha carga de estrés generando ‘conversaciones internas´ referidas a ‘qué estará pensando el aquejado’, dando lugar a la culpa, al miedo y al enojo. Esta cuestión afecta a la recuperación del internado, siendo la música en este caso de gran ayuda”, concluyó Acosta.
