Obsequió un trofeo en agradecimiento a profesionales locales
Héctor Rolando Manca recibió un trasplante de hígado hace 13 años en el Hospital Italiano de Buenos Aires. Hace un par de semanas sufrió una descompensación y fue atendido en el Hospital Padilla, en la Sección de Hepatología del Servicio de Gastroenterología. Una historia de gratitud y conciencia ante el trabajo de los profesionales de la institución.
El Hospital Padilla recibió de manos del señor Manca el trofeo del segundo puesto que obtuvo en una carrera de Mountain Bike, en Los Nogales. Desde el 2003 Héctor hizo del ciclismo de montaña su estilo de vida y la herramienta número uno en el cuidado de su salud.
“Vuelvo al Padilla después de una descompensación que sufrí, por la que fui atendido y en agradecimiento especial a la excelente atención que me brindó todo el grupo de profesionales”, expresó Manca, quien destacó por sobre todo la fibra humana de la dirección de la institución, a cargo de la doctora Olga Fernández, y del equipo que lo asistió, no solo en esta oportunidad, sino desde muchos años antes, durante su proceso de recuperación luego de ser trasplantado.
Intervinieron en su tratamiento la doctora Moira Zunino de la Unidad de Trasplante Hepático; el doctor Martín Carbonetti; las hepatólogas, doctoras Ana Palazzo, Dolores Murga y Daniela Pérez. También estuvo presente el jefe del Departamento de Procuración y Trasplante de la institución, doctor Santiago Villavicencio Fornaciari.
Los profesionales que asistieron a Manca comentaron que se podría haber tratado de un rechazo del órgano trasplantado, pero luego de compensar al paciente y hacerle los estudios respectivos llegaron al diagnóstico de un cuadro de inflamación de vías biliares, no relacionado con su trasplante, que fue debidamente atendido y resuelto en el Hospital por el área de Hepatología.
Manca, como ejemplo de perseverancia en que se convirtió, realiza ya desde hace 12 años charlas y campañas en colegios y escuelas. “Trato de estar con mi testimonio en todos los rincones a los que puedo llegar, como escuelas de alta montaña, con la consigna ‘Donar órganos es dar vida’ y que todos entiendan que sin donantes no hay trasplante”.
La doctora Fernández destacó que “Etim”, como lo llaman con cariño, es un ejemplo porque se dedica a difundir la práctica del Mountain Bike como forma de mejorar la calidad de vida. “Es beneficioso para el organismo de todas las personas, especialmente para los pacientes que recibieron trasplantes, así como mantener una alimentación saludable”, sostuvo la directiva.
Un diagnóstico precoz, un tratamiento oportuno, y una rápida recuperación pudieron tener lugar principalmente gracias al estado físico óptimo que Manca presenta, cumpliendo además con todos los controles y una dieta saludable seguida de actividad física diaria programada.
“Las ganas de vivir que manifiesta Etim, el amor a la vida que él tiene, esto fue fundamental. Yo lo conozco, desde hace muchos años realiza promoción de la Donación de Órganos, esto es muy importante para llegar a la comunidad y en Tucumán la gente está respondiendo positivamente”, remarcó Fernández, al tiempo que enfatizó que el Padilla actualmente se encuentra en primer lugar como Hospital Donante a nivel nacional.
Finalmente Manca, los directivos y el equipo de profesionales con el trofeo, visitaron el monumento a “Donantes Héroes Anónimos”, realizado por el artista Jorge Lobato, inaugurado el Día Nacional de la Donación de Órganos.