Por qué el reuma no existe

Según especificó la reumatóloga del hospital Avellaneda, Alejandra Pereira, el término ‘reuma’ no existe en el diagnóstico médico. Sin embargo, lo que existe son las enfermedades reumáticas, con alta incidencia en la población, y que, al no recibir tratamiento de manera oportuna, pueden provocar graves secuelas en quienes las padecen.

“En la reumatología existen dos grandes entidades: la artrosis, que es lo que la gente comúnmente llama reuma y que se trata de una enfermedad de carácter degenerativo crónico que va acorde a la vida del paciente y al desgaste de las articulaciones; y por otro lado, las enfermedades inflamatorias osteoarticulares, que sería el caso de la artritis reumatoidea. También dentro de la especialidad tenemos otro capítulo que son las enfermedades sistémicas que afectan todos los órganos del cuerpo y que también abarca la reumatología”, dijo Pereira.

La especialista contó que el servicio del efector atiende a más de 200 pacientes semanales con algún tipo de patología reumática, como artrosis, artritis, osteoporosis o lupus; con una franja etaria que va de los 16 a los 70 años y con una gran población de mujeres de entre 30 y 50 años, que es el pico de incidencia de la artritis reumatoidea, siendo la mayoría de las enfermedades reumáticas de mayor incidencia en mujeres que en varones.

“Por otro lado está la osteoporosis, que también muchas veces la gente lo confunde con reuma, y que es otra entidad que en realidad tiene su origen cuando la mujer empieza la menopausia, al caer los niveles de estrógeno y progesterona, provocando una descalcificación o una llegada de menos calcio al cuerpo, y que se comparte el diagnóstico con la ginecología y la endocrinología, quienes también están capacitados para evaluar y para atender al paciente”, especificó Pereira.

Cabe destacar que la identificación precisa y oportuna de cada patología por el profesional ayuda en gran medida a llegar a un tratamiento correcto, permitiendo un tratamiento oportuno y evitar de esta manera daños irreversibles que son generalmente consecuentes a los procesos inflamatorios que provocan estas patologías.