Qué es el Síndrome de Colon Irritable y cómo prevenirlo
El jefe del servicio de Gastroenterología del hospital Nicolás Avellaneda, doctor Pedro Rubén Farías, brindó información acerca de la patología que afecta de forma predominante a la población femenina y que tiene asociados de manera directa factores de estrés y depresión que pueden controlarse solicitando asistencia integral de salud.
El síndrome de intestino o colon irritable es un trastorno funcional que se caracteriza por un dolor o malestar abdominal recurrente, que se acompaña de síntomas gastrointestinales como constipación o diarrea, o la alternancia de ambos síntomas por época. No es un trastorno orgánico- ya que no se trata de una enfermedad que progrese hacia cuadros más severos-, pero suele generar variadas molestias para el normal desarrollo del día a día de quienes lo padecen. |
A nivel epidemiológico los registros arrojan que el síndrome de colon irritable es mucho más frecuente en mujeres que en hombres, suele presentarse entre los 30 a 50 años de edad y se caracteriza por una mayor sensibilidad integral del colon, esto altamente asociado a factores psico-emocionales como ansiedad y depresión, o a un síndrome de post-infección bacteriana intestinal y a transgresiones alimentarias o a algún componente genético.
«El organismo de choque ante diferentes factores emocionales o dietéticos es el intestino, especialmente el colon. En la actualidad se está hablando no solo de colon irritable, sino también de intestino o aparato digestivo irritable que a nivel del estómago sería gastritis, a nivel del intestino enteritis y a nivel del colon un colon irritable», afirmó Farías.
Respecto a la sintomatología que trae asociado este síndrome el especialista comentó que se trata de una serie de síntomas comunes e identificables, si bien en la actualidad los alcances de los exámenes de diagnóstico complementario y el conocimiento de los antecedentes familiares de componente genético de otras enfermedades asociadas permiten arribar al diagnóstico por diferentes vías.
«Muchas veces se trata de pacientes que ya vienen de una cadena de consultas de médico en médico y vienen bastante estudiados. Esta es una enfermedad que no solo depende del tratamiento que se indique al paciente, sino de cómo se siente desde el punto de vista de su salud mental, si está pasando por momentos de estrés o si tuvo trastornos emocionales como una mudanza, una separación, problemas laborales o la muerte de algún afecto, ya que todo esto repercute directamente sobre los intestinos», aclaró.
Si el paciente se encuentra más cercano al rango de los 50 años el profesional no descarta la posibilidad de practicar una colonoscopía como estudio complementario y respecto al tratamiento médico, Farías hizo hincapié en que básicamente se busca abordar los espasmos del colon con alguna clase de antiespasmódico, como la Trimebutina, y que si se detectan factores de depresión se busca derivar con el especialista pertinente que pueda tratar y medicar para lograr el equilibrio entre los aspectos mentales y los físicos.
«Tratar de manifestar de la mejor manera posible la parte emocional, llevar una buena dieta, practicar periódicamente gimnasia y buscar apoyo terapéutico ayudan a los pacientes a salir del estrés y de la mano a mejorar la sintomatología que acompaña a esta patología», concluyó.