Qué es el Síndrome de Ovario Poliquístico
El médico tocoginecólogo staff de Sala de Parto y Servicio de Fertilidad del Instituto de Maternidad “Nuestra Señora de las Mercedes”, doctor Carlos Murga, ofreció información acerca del síndrome de ovario poliquístico que tiene cada vez mayor incidencia en la población femenina y que se asocia a otras múltiples afecciones que comprometen la salud integral de la mujer.
El síndrome de ovario poliquístico es un trastorno hormonal que ocasiona ovarios de mayor tamaño con pequeños quistes en los bordes externos. Al tratarse de un síndrome clínico, produce variados tipos de sintomatología: «Su origen es multifactorial, ya que intervienen tanto causas genéticas como factores ambientales propios del ámbito intrauterino- por ejemplo la diabetes gestacional no controlada, un bebé que está creciendo mucho en la panza o uno que hizo una restricción de crecimiento, son factores que favorecen a un clima intrauterino adverso que tiende a desarrollar este síndrome», sostuvo el profesional. |
Una vida sedentaria, una dieta rica en grasas, con el consecuente sobrepeso y obesidad, están también asociados al síndrome de ovario poliquístico, que se caracteriza por dos elementos principales: hiperandrogenismo o aumento de los andrógenos-hormonas masculinas- y disfunción ovárica, que puede ser por falta de ovulación o aumento de folículos que no crecen para ovular.
«Es normal que la mujer tenga un bajo nivel de hormonas masculinas, pero en este caso en particular se sucede un aumento que determina, entre otras cosas, la aparición de acné- que es común en la adolescencia pero no tanto en la edad adulta- o el desarrollo de vello excesivo», agregó.
Respecto a la disfunción ovárica, el mal funcionamiento de ovarios suele ser el mayor motivo de consulta, sea por una oligo-anovulación o falta de ovulación que ocasiona la ausencia de menstruación, oligomenorrea o amenorrea, o cuando por indicación de ecografía transvaginal se detecta una cantidad de folículos excesivos que contienen los óvulos, pero ninguno crece para ovular y se consulta en este caso por infertilidad.
Las consultas suelen ingresar por el área de Ginecología, por el servicio de Fertilidad, Dermatología o Endocrinología y generalmente es conveniente que las mujeres que padecen este síndrome soliciten también un espacio de psicoterapia para afrontar los cambios que atraviesan a raíz del mismo.
«Consultar acerca del peso con el que se nació, qué estilo de vida se lleva, realizar el examen físico, control de peso, de índice de masa corporal, la observación de signos que aparecen en el cuerpo como la acantosis nigricans o manchas que se ubican en los pliegues de la piel a causa de un exceso de insulina, realizar determinaciones hormonales por laboratorio y ecografías, son importantes herramientas que posibilitan arribar al diagnóstico oportuno», resaltó.
Cabe destacar que toda esta sintomatología si no es tratada a tiempo puede desembocar también en un síndrome metabólico que aumenta la probabilidad, en la persona que lo padece, de desarrollar enfermedades cardiovasculares o diabetes a largo plazo, así como favorece el desarrollo de neoplasias o cáncer hormono- dependiente.
Una vez determinado el diagnóstico el tratamiento es variable, dependiendo, entre otras cosas, de la voluntad y el deseo de la mujer de ser madre, de cambiar sus hábitos alimenticios y regular qué tipo de alimentación deberá sostener, de la mano de la práctica de actividad física adaptada, la elección del tipo de anticonceptivos adecuados y la posibilidad de iniciar un tratamiento con antiandrógenos o con medicación para sensibilizar la acción de la insulina.
Al momento de brindar una recomendación para sobrellevar o evitar este tipo de patología, el profesional reflexionó que vivimos en un mundo donde, de la mano del uso exacerbado de tecnologías, se favorece el sedentarismo, la mala alimentación y además la pandemia favoreció el ausentismo en las consultas y controles. «Antes que nada hay que estudiar los signos como la ausencia de menstruación y sondear en sus causas y patologías asociadas para prevenir enfermedades crónicas como diabetes o afecciones cardiovasculares», concluyó.