Qué es la Aterosclerosis y cómo detectarla a tiempo
La cardióloga de staff del hospital Nicolás Avellaneda, doctora Patricia Lizardo, aborda este tema explicando de qué se trata esta enfermedad, los factores de riesgo que colaboran en su progreso y cómo actuar al respecto.
“Una arteria es como un caño que tiene tres capas, una externa o adventicia (de tejido conjuntivo), una media (con fibras musculares) y una interna o íntima (compuesta por el endotelio y una capa conjuntiva subendotelial). Cuando hablamos con los pacientes, se les indica que la Aterosclerosis es una especie de cañería que se llena de sarro. Es una enfermedad de la capa interna de las arterias”, comienza diciendo la especialista.
Es una enfermedad que se manifiesta con la presencia de placas de colesterol en su interior, y esto puede llegar a obstruir la arteria; estas placas van creciendo hacia adentro hasta que tapan la arteria, o algunas de esas placas se rompen y desprenden un coágulo que viaja por la corriente sanguínea y termina impactando en una arteria más chica donde produce los síntomas.
“Esa capa interna llamada endotelio, no siempre se da porque la persona tiene el colesterol alto, sino que esa capa interna se va a lastimando, erosionando, inflamando, por la presencia de otros factores de riesgo, como ser: hipertensión, diabetes, tabaquismo. Éstos van dañando la capa interna, entonces el colesterol encuentra una zona rugosa, lastimada, donde se puede ir depositando y formando la placa. La edad también es un factor de riesgo”, advierte.
Incluso, aclara la médica, algunos pacientes no presentan valores de colesterol alto, sino que los estudios marcan parámetros normales. Sin embargo, el endotelio estaba enfermo y permitió que ese colesterol se deposite.
“Entonces justamente cuando hacemos el abordaje del paciente hay que estar atento a estos detalles. Un buen interrogatorio, examen físico y estudios correspondientes, son importantes”, remarca.
Luego, expone que los síntomas van a variar de acuerdo a la zona en cuestión: a nivel carotídeo serán cerebrales como mareos, desmayos, síncope, alteración visual; a nivel cardíaco, el paciente puede llegar a sentir falta de aire, dolor de pecho (sin llegar a ser como un infarto); y en los miembros inferiores, se manifiesta con dolor tipo ardor o quemante en zona de pantorrillas y ante el esfuerzo físico.
Es elemental acudir al médico especialista ante cualquiera de estos signos y prevenir riesgos más graves.