Qué es una endoscopía y para qué sirve
Se trata de una técnica diagnóstica, de la rama de la medicina, que consiste en la introducción de una cámara o lente dentro de un tubo o endoscopio a través de un orificio natural, una incisión quirúrgica o una lesión para la visualización de un órgano hueco o cavidad corporal. Se practica en los hospitales de referencia de la provincia como el Centro de Salud.
Sobre esto, el gastroenterólogo Lino Campero, médico del efector, detalla: “Trabajamos con un equipo que tiene una caña o endoscopia donde uno de los extremos va hacia un procesador que capta las imágenes que va a recibir el otro extremo del endoscopio que es lo que se introduce en el paciente. Podemos introducirlo por la boca o por ano, estamos hablando entonces de una endoscopía alta y baja”.
Y continúa: “Las endoscopías altas y bajas, antes se consideraban netamente métodos diagnósticos. Pero eso cambió en la actualidad, el endoscopista también es terapéutico, es decir que hace diagnóstico de los padecimientos de cada órgano y también puede ser terapéutica. Llámese a nivel del estómago si hay un pólipo, una lesión, muchas veces podemos extraerla. Hablando también de vía biliar, ingresamos con un aparato especial, llegamos a la segunda porción del duodeno, inmediatamente podemos ingresar hacia el conducto del páncreas o del hígado y se hace la terapéutica en cualquiera de estos”.
Sin embargo, aclara el especialista, los pacientes deben saber que en endoscopía los riesgos existen. “No estamos hablando por ejemplo de una ecografía donde se coloca un transductor en el abdomen del paciente y nada más. Éste es un método invasivo donde podemos tener riesgos. Hay tratados donde hablan sobre las complicaciones de una endoscopía pero debemos saber que son riesgos medibles y que se pueden asumir. Son riesgos escasos”, cierra.